Un recuerdo imborrable
Ex esquiadora olímpica
s un día triste para el deporte español y para el deporte femenino, y en especial para el esquí alpino. Blanca Fernández Ochoa fue una pionera y un ejemplo para todos nosotros. No llegué a competir con ella por la diferencia de edad, pero sí he coincidido con ella, tanto en mi época de corredora como después. Blanca siempre fue un gran referente para todos los jóvenes que en mi época esquiábamos y soñábamos algún día en llegar a la élite del esquí alpino nacional e internacional. Recuerdo con cariño el día que ya siendo campeona vino a pasar un día con todos los niños y niñas de la escuela de Sierra Nevada. Para nosotros era lo máximo, íbamos a esquiar con una de las deportistas que había sido un héroe para todos nosotros después de lograr la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Albertville de 1992. Subimos a pista y todos nosotros esquiamos tras ella. ¡Estábamos esquiando junto a la medallista olímpica, junto a una de las deportistas que admirábamos! Han pasado los años y lo recuerdo como el primer día, como si fuera ayer. Recientemente volvimos a coincidir en las finales de la Copa del Mundo de Grandvalira, Andorra, esta pasada temporada. Pienso en ello y parece mentira lo que le ha sucedido. Me gustaría recordarla como lo que fue, como todo un referente, que además fue la encargada de mostrar la senda del éxito al deporte femenino con sus éxitos, no sólo en los Juegos Olímpicos, sino también en la Copa del Mundo, Mundiales o en los Campeonatos de España. ¡Hasta siempre Blanca! ●