Berrettini es la gran revelación
➔ A sus 23 años es el segundo italiano que llega a semifinales del US Open, tras Corrado Barazzutti (1977)
➔ Matteo Berrettini sigue viviendo un sueño en el US Open. A sus 23 años se aseguró ser el segundo italiano que disputa las semifinales en este torneo, tras Corrado Barrazzutti, que cedió en esa ronda de 1977, en las instalaciones de Forest Hills y sobre tierra verde.
Berrettini, 25º en el ATP, entró en el top-100 la pasada campaña. Su progresión está siendo meteórica, y lo certificó batiendo a un veterano, el francés Gael Monfils, 33 años y 13º ATP, por 3-6, 6-3, 6-2, 3-6 y 7-6 (5) en 3h.56’.
El transalpino aspira a ser el primer hombre de su país que triunfa en el Grand Slam estadounidense (ya lo hizo Flavia Pennetta en el femenino de 2015) y que revalida la gloria de Nicola Pietrangeli y Adriano Panatta en Roland Garros.
Desde su imponente físico, con 1,96 metros de estatura y una imponente envergadura, Berrettini enseñó potencia con el saque y la derecha, un buen abanico de recursos técnicos. Tiene calidad, que no lógicamente experiencia, y casi se lleva un buen susto por los nervios de cerrar una victoria tan relevante. Sirvió para partido con 5-3. Primero falló un saque y volea que significó 30-30 y no 40-15. Con 40-30 llegó el punto de ‘match’, y lo malogró con doble falta. Jarro de agua fría que le costó el ‘break’, devolver a la batalla a Monfils, capaz de retorcerse sobre sí mismo como si se estuviese muriendo de dolor y pegar un segundo después un raquetazo demoledor.
Con 6-5 Berrettini, la segunda bola de ‘match’ acabó con el resto del romano en la red; la tercera tampoco pasó al otro lado, con un revés fallado después de un largo e intenso intercambio. Monfils sobreviviendo hasta el ‘tiebreak’ pese a las dobles faltas (17 en el total) y con el apoyo de su pareja y semifinalista Elina Svitolina.
El galo levantó otro punto de partido con un ‘ace’, hasta que decidió un buen primer servicio de