Ambiente de derbi en una Copa que motiva

➔ El pase exigirá a la Real ganar por primera vez tres partidos seguidos en Anoeta

➔ Un derbi es un derbi. Por mucho que le hayan cambiado el horario dos veces para terminar poniéndolo un miércoles a las 21.00 horas, por mucho que sea la Copa, un Real-Osasuna es un partido diferente y especial y como tal se vivirá en la grada.

Así lo demuestra el hecho de que ayer se agotaran en Iruñea en apenas unas horas las 868 entradas que puso la Real a disposición de Osasuna. El espacio reservado a la afición visitante se llenará por primera vez esta temporada y además no se puede descartar que varios aficionados rojillos se ubiquen en las zonas reservadas a la afición local, puesto que han podido hacerse con los tickets a través de Internet, con lo que se puede decir que habrá en torno a 1.000 aficionados del conjunto navarro viendo el encuentro.

Por tanto, los de Jagoba Arrasate tendrán el aliento de los suyos para intentar frenar a un equipo txuri urdin que buscará su tercera victoria consecutiva en Anoeta por primera vez desde que quitaron las pistas.

Es más, para encontrar la última ocasión en la que la Real celebró dos victorias consecutivas hay que remontarse cuatro meses en el tiempo. El 26 de septiembre, la Real superó al Alavés (3-0) después de haber vencido al Atlético de Madrid en la anterior jornada (2-0). Sí que se pueden hallar más de dos triunfos de carrerilla si se tienen en cuenta los dos últimos duelos del pasado curso (2-1 ante el Getafe y 3-1 ante el Real Madrid) y los dos primeros del actual. Pero en una misma campaña la parroquia blanquiazul nunca ha salido de buen humor en más de dos partidos seguidos.

SEMANA PERFECTA Si vence a Osasuna, la Real habrá ganado tres partidos en casa en sólo siete días

Sin ganar desde noviembre

Con el triunfo frente al conjunto espanyolista, los de Imanol cerraron una racha de casi dos meses sin conocer la victoria ante los suyos. La anterior victoria databa del 30 de noviembre ante el Eibar y tras ese duelo, un empate frente al Barcelona y una derrota contra el Villarrealdibujaronlatrayectoriadelequipo en Amara.

Ahora, los jugadores blanquiazules quieren cerrar la que sería una semana redonda, puesto que en sólo siete días podrían imponerse ante su gente contra el Espanyol, el Mallorca y Osasuna.

Si tal cosa sucede, el próximo miércoles podría volver a haber fútbol en Donostia si las caprichosas bolas del sorteo de Copa determinaran que la Real debe jugar los cuartos de final del torneo del KO como local. El siguiente rival liguero será el Athletic, el día 9 de febrero ●

EN ANOETA La Real no ha ganado tres partidos seguidos desde que quitaron las pistas