Ni el coronavirus la detiene
➔ Clara Azurmendi relata cómo ha pasado el confinamiento y qué tipo de entrenamientos realiza ahora que se puede salir
➔ No esta siendo fácil para los deportistas de alto rendimiento adaptarse a los cambios que ha obligado la pandemia. Todo está lleno de incertidumbre de cara a volver a retomar las competiciones y, aunque ya parece que nos vamos acercando al final, aún queda mucho trabajo que realizar para poder ganarle la batalla al virus. Mientras todo esto ocurre, los profesionales del deporte siguen intentando mantenerse en forma para cuando les den permiso de retomar la actividad.
Es el caso de Clara Azurmendi (Donostia, 1998), quien admite que ha llevado “bastante bien” todo el confinamiento. La jugadora donostiarra de bádminton ha intentado constantemente “mantener la mente distraída, sobre todo cuando no se podía hacer nada, pero siempre desde el principio nuestros preparadores físicos y entrenadores nos han estado enviando ejercicios físicos y entrenamientos para hacer dentro de lo que se podía”, relata.
Su forma de trabajar durante la crisis sanitaria poco o nada ha tenido
Clara Azurmendi He intentado mantener la mente distraída, sobre todo cuando no se podía hacer nada”
El otro día fui a la playa a entrenar y hacer unos ejercicios de desplazamiento y eso que llevaba como dos meses sin simular los movimientos de bádminton”
que ver con la manera en la que entrenaba antes de que el virus se extendiera por todo lo largo y ancho del planeta. “En el garaje me monté un miniespacio para entrenar y con una bici de spinning que tengo intenté hacer el máximo cardio posible”, explica. Al mismo tiempo, también se montó diferentes “circuitos de ‘heat' para que fuese lo más parecido a un entrenamiento de bádminton”, comenta. No eran, ni mucho menos, las condiciones idóneas para que una deportista de su talla trabajara, aunque la donostiarra comenta que “no me puedo quejar”.
Ahora por lo menos se permite salir a practicar deporte e incluso los deportistas de alto rendimiento suelen gozar de ciertos permisos especiales para poder ejercitarse dentro de las mejores condiciones posibles. En ese sentido, Clara Azurmendi comenta que “el otro día fui a la playa a entrenar y hacer unos ejercicios de desplazamiento y eso que llevaba como dos meses sin simular los movimientos de bádminton”. Para alguien como ella, volver a coger el ritmo puede ser una tarea complicada. “Madre mía, casi me da algo”, revela.
Sin competir desde febrero
Por el momento, en el mundo del bádminton las competiciones están paradas hasta mediados de julio. “Cien por cien no se sabe nada”, explica Azurmendi. “Poco a poco van suspendiendo los torneos y yo creo que hasta octubre, con suerte, no podremos salir a competir”, admite.
Por supuesto, ella se encuentra “con muchas ganas” de volver a sujetar una raqueta. “Sí que se agradece las primeras semanas ese descanso o despeje en la cabeza, pero desde la tercera, nunca hemos estado tanto tiempo parados, pero el entrenamiento en pista el primer día va a ser un ‘show'”, comparte. Y es que este periodo es, sin duda, uno de los más largos en su vida sin poder tocar una raqueta. “El máximo fue como hace dos años” cuando sufrió “una pequeña lesión de rodilla“. Aquella vez “no llegué ni a un mes, estuve dos o tres semanas. Ahora con dos meses no quiero ni imaginármelo”, afirma ●