El quinto puesto sigue estando a tiro
➔ Si se reencuentra con el triunfo hoy, la Real adelantará a Villarreal y Getafe
➔ El quinto puesto sigue a tiro de la Real después de los resultados de ayer. Dos de los rivales directos del conjunto txuri urdin jugaban a domicilio y lo hicieron con resultados desiguales. Mientras el Atlético de Madrid logró su tercera victoria consecutiva en su visita al Levante (0-1), el Getafe volvió a pinchar. Los de Bordalás, que todavía no han ganado desde que se reanudó la competición, empataron en Valladolid (1-1).
El tanto en propia de Bruno González, tras una maniobra en el área de Marcos Llorente, pone más cara la plaza Champions. Con su triunfo, el Atlético se sitúa tercero con 55 puntos, ocho más que la Real a expensas de lo que suceda esta tarde en Anoeta. Tras un empate inicial contra el Athletic, el conjunto colchonero ha superado a Osasuna (0-5) y Valladolid (1-0), además de su triunfo de ayer. Oblak sólo ha encajado un gol en los cuatro encuentros.
El Getafe es la cruz de la misma moneda. El conjunto de Bordalás no ha sumado un triunfo desde que el balón se puso en marcha de nuevo, lo que concede a la Real la posibilidad de volver a situarse por delante de los azulones.
Tras caer en Granada en la jornada inicial (2-1), el Getafe empató en casa ante Espanyol (0-0) y Eibar (1-1). Ayer, cosechó una nueva igualada en Zorrilla.
Los resultados, por tanto, ponen cuesta arriba la posibilidad de entrar en Champions a los de Imanol Alguacil, si bien el empate del Sevilla ante el Villarreal del lunes (2-2) podría permitir a los txuri urdin establecerse a tres puntos del cuarto puesto. Un triunfo ante el Celta esta tarde permitiría, además, adelantar en la tabla a dos equipos de una tacada: la Real superaría en un punto al Getafe y en dos, al Villarreal ● asta marzo nada hubiese detenido a la Real. Ni el VAR, que ha tenido una indiscutible influencia, casi siempre para mal, en los tres partidos de los txuri urdin tras la reanudación, ni mucho menos un tendencioso árbitro como
que protagonizó la actuación más desequilibrante que se recuerda en años en Anoeta. Siempre en la dirección del poderoso, lo peor que se puede decir de un juez. A estas alturas está acreditado que, debido a su desigual utilización, su falta de unidad de criterio, poco se puede esperar del VAR, cuya peor contribución, por encima del uso partidario que se le pueda dar (ahora un colegiado puede favorecer o perjudicar en el césped y en la TV), ha desnaturalizado el fútbol. Conscientes de que ahora se castigan acciones que, por ligerísimas, como el presunto penalti a o las
Fernández, Estrada Vinicius Le Normand
hipotéticas manos de en el Camp Nou, antes pasaban por alto, los futbolistas han caído en una suerte de delirio interpretativo en el que penetran en el área dispuestos a fingir cualquier cosa o reclaman cuestiones surrealistas. La delgadísima línea que separa ahora el castigo de la corrección, además, se convierte en la mejor coartada para abrir una grieta mucho mayor entre el potencial de los más poderosos y el resto, propulsados los primeros por la extrema sensibilidad de los árbitros para juzgar, a su favor, las acciones que les competen. Con todo, el problema de la Real no es que le ganó el Madrid, sino que sumó un punto ante Osasuna y Alavés. Y, sobre todo, que jugó muy mal. Hasta marzo, nada le habría parado. Si no se acerca a ese nivel de juego, de poco servirá la pataleta arbitral. Y debe hacerlo desde hoy. Es urgente ●