Desde Barcelona se quejan…
El nivel de escándalo de las polémicas arbitrales de los partidos se decide desde Madrid
En las polémicas arbitrales que perjudican al tienen un carácter periférico. Es decir, las decisiones más dudosas que ha asumido el árbitro no tienen entidad suficiente como para ser cuestionadas a nivel del propio programa, como pasa en otras ocasiones, sino que son una especie de concesión que hace el programa respecto unos lamentos ajenos a ellos. ¿En qué se nota? En la manera de
de darles paso. Como epílogo de la debacle del Barça el presentador anuncia: “Desde Barcelona
Carreño Deportes Cuatro, Barça Manu
reclaman que antes de que tocase el balón ya estaba dentro del área”. Lo relevante de la frase no es la explicación de la jugada sino la introducción: “Desde Barcelona reclaman…”.
Así como hay polémicas arbitrales que el programa asume como propias y debatibles, las que perjudican al Barça son llanos que llegan desde lo lejos. Segundos más tarde, respecto otra jugada, el programa insistía en precisar que “En Barcelona se quejan…”. Esta manera de expresarse demuestra, sobre todo, la mirada Lógicamente, como el programa se hace desde
todo lo que acontece en la capital o tiene que ver con ella, es lo común, lo global, lo que afecta a todos. Nunca tendrá sentido el concepto “Desde Madrid se quejan…” porque el relato se estructura desde ese lugar. Las polémicas arbitrales que afectan al Madrid son eso, polémicas arbitrales de carácter global y de interés general. Las polémicas
Correa Madrid, Saúl ‘Madricéntrica’.
arbitrales que afectan al Barça, en cambio, son quejas periféricas, algo que no va con el pro- grama.
En otras ocasiones, con otros equipos (no hace falta precisar cuál) el hecho que el árbitro decida no consultar el por ejemplo, es motivo de in- dignación de los presentadores o genera cierta de- nuncia para reivindicar criterios más sólidos al colectivo arbitral. Los presentadores se implican emocionalmente en reclamar más rigor profesio- nal a los colegiados. Pero si afecta al Barça, la polé- mica es ajena, “llega desde Barcelona”, es un en- gorro, un victimismo que viene de lo lejos, de la periferia y que, casi por caridad, consultan a
para que confirme que todo son quejas in- fundadas. La contundencia e intensidad de las po- lémicas arbitrales no vienen determinadas por la gravedad del error sino por el puro interés mediá- tico que se decide desde la capital ●
rralde VAR, Itu