Un rendimiento espectacular, sobre todo al inicio
➔ Odegaard fue el jugador de LaLiga hasta noviembre, luego la lesión le hizo bajar un tanto sus prestaciones
➔ Martin Odegaard tenía a la afición de la Real metida en el bolsillo desde la pretemporada y los primeros encuentros de Liga ratificaron que se trataba de un futbolista con un talento y un talante especiales. El rendimiento del noruego en su única temporada vestido de txuri urdin ha sido extraordinario, impecable. Es evidente, y los números así lo establecen, que el trazado de su rendimiento es un tanto descendente, pero esto viene motivado por esa tendinopatía rotuliana, que le atormentó desde octubre hasta el final, especialmente en las últimas semanas.
Su aparición fue deslumbrante. Fue el jugador de LaLiga hasta noviembre. De hecho, LaLiga le otorgó la distinción del mejor jugador de septiembre. Enseguida encajó a la perfección en la posición de volante derecho del esquema 4-4-3 de Imanol. Con él, el equipo dio con la correa de transmisión que llevaba años buscando, el último surtidor para los delanteros.
Sólo en la primera vuelta de Liga marcó cuatro goles y dio cinco asistencias. La estadística final habla de siete goles -cuatro en Liga y tres en Copa- y nueve asistencias -seis en Liga y tres en Copa- y 36 partidos oficiales, 34 de ellos como titular. Es el quinto realista en número de minutos en Liga (2.533), por detrás de Merino (3.143), Oyarzabal (3.063), Zubeldia (2.639) y Zaldua (2.551).
Su papel en la Copa también fue determinante para llegar a la final, con sus goles en las tres últimas eliminatorias contra Osasuna, Real Madrid y Mirandés y las asistencias ante el Espanyol y los rojillos. Además, demostró un compromiso a prueba de bombas jugando lesionado las últimas jornadas. Se le echará de menos ●