Tres guipuzcoanos en cada grupo de Tercera
Más inactividad que otros equipos
➔ El Real Unión sigue en los tacos de salida, con los músculos en tensión y el tímpano afinado, a la espera de escuchar el pistoletazo de salida para arrancar. La incertidumbre ensombrece el futuro deportivo del conjunto irundarra, que tras verse obligado a cancelar el inicio de la pretemporada dos veces, aspira a poder comenzar a trabajar el martes.
El engranaje está preparado pero necesita certezas por parte de federaciones e instituciones. En concreto, tres. La primera es una fecha concreta y oficial de inicio de la Segunda División B. Todos los rumores apuntan al 18 de octubre, pero no hay nada confirmado. Además, los nueve clubs vascos solicitaron el pasado 10 de agosto a la Federación Española de Fútbol que la pretemporada tuviese un mínimo de ocho semanas, teniendo en cuenta que llevan desde marzo sin entrenarse. Tomando esa solicitud en consideración, comenzar el 18 de octubre sería precipitado, si bien es una opción que continúa sobre la mesa y que los equipos tendrían que acatar, haciendo frente a los problemas físicos que podría ocasionar.
El segundo punto a resolver es el del protocolo sanitario. La Federación Española resolvió que fuesen las instituciones regionales quienes resolvieran este asunto. La Federación Vasca remitió al Gobierno Vasco hace dos semanas
Una de las cuestiones que preocupan en el seno del club es que, en el caso de que la Liga arranque a mediados de octubre, lo harán en desventaja con filiales y equipos que han disputado el play off. Los irundarras llevan sin entrenarse desde marzo, al contrario, que esos casos, lo que supondría un obstáculo importante de cara a la liga
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una propuesta de protocolo, pero sigue sin recibir el visto bueno para que entre en vigor.
Por último, el Real Unión considera indispensable que, antes de comenzar el trabajo, exista una seguridad jurídica sobre la propia competición. Es decir, un plan sobre cómo actuar en caso de que haya un positivo, o varios. Si se aísla a los jugadores y se continúa, si se aplaza el partido, la jornada... Y también en lo relacionado a los contratos en el caso de que la com- petición tenga que pararse.
Tres puntos que el club irunda- rra considera imprescindibles an- tes de alzar el telón. De esa forma, la entidad quiere evitar un inicio en falso que supondría un perjui- cio económico importante, además de un posible riesgo sanitario.
En este periodo de espera, los costes que asume el club son mínimos. Sin embargo, en el momento en el que arranque motores, tendrá que dar de alta a futbolistas y cuerpo técnico, además de otros gastos añadidos. Si lo hace antes de tiempo y finalmente el inicio de Liga se retrasa, las consecuencias pueden ser muy dañinas.
Está previsto que la Federación Española se reúna el lunes para tomar decisiones sobre estos asuntos, por lo que el Real Unión está preparado para comenzar a entrenar el martes. Los reconoci- mientos médicos ya han sido supe- rados y el equipo tiene el cuchillo entre los dientes. Sólo falta el pis- toletazo de salida ●
Ayer se dieron a conocer los dos subgrupos del grupo IV de Tercera tras la reunión de la FVF con los clubs. Los 22 equipos de Tercera se dividirán en dos grupos, con tres representantes guipuzcoanos en cada uno. En el grupo 1, la Real, el Tolosa y el Beasain se medirán a Somorrostro, Sestao River, Gernika, Balmaseda, Santutxu, Aurrera de Ondarroa, Deusto y Urgatzi. Por su parte, en el grupo 2, Anaitasuna, Lagun Onak y Pasaia se verán las caras con Basconia, CD Vitoria, San Ignacio, Sodupe, Santurtzi, Cultural de Durango, Urduliz y Ariznabarra ●
1 DE SEPTIEMBRE Es la nueva fecha para comenzar, a la espera de resoluciones de la Federación Española
OCHO SEMANAS Considera que es el periodo de puesta a punto necesario