Echa de menos un clima de calor y de fiesta
➔ Rafa Nadal comenzará el lunes su decimoquinta participación en Roland Garros, donde debutó en 2005 ganando la primera de sus doce Copas de los Mosqueteros actuales. Se enfrentará al bielorruso Egor Gerasimov, 27 años y 83º del ranking ATP, sabiendo que no habrá una tercera final seguida contra el austríaco Dominic Thiem, su hipotético rival en semifinales.
El reciente campeón del US Open considera que “Nadal es el gran favorito, aunque las condiciones hayan cambiado un poco y favorezcan más a Djokovic”.
Nadal, 34 años, no menciona al nº 1 mundial en su videconferencia con los medios, centra sus miras en “las condiciones más duras, negativas” con las que ha afrontado nunca su Grand Slam fetiche, que abandonó sus fechas habituales en primavera por las de otoño para esquivar la cancelación por la pandemia Covid-19.
A la falta de rodaje en competición, que se reduce los últimos siete meses a los tres partidos de la semana pasada en Roma, se añade el frío y la lluvia de París, una meteorología que de por sí ralentiza el
Roland Garros diseñó un torneo con 20.000 espectadores diarios, que redujo posteriormente a 11.500. La semana pasada la cifra cayó a 5.000, que desde ayer es de 1.000. Un efecto más de la pandemia, que ha dirigido a los tenistas a una burbuja centrada en dos hoteles de París, la instalación principal y las canchas de entrenamiento anexas. “Lo que pasa fuera de la pista no tiene impacto. Estar en otro hotel no afecta para que ganes un punto más o menos. No podemos salir a cenar, pues bueno no podemos. Nos aparta de la rutina, sí, pero es este año y nos adaptamos”, dice Nadal.
juego. Un factor más pronunciado con la nueva pelota, que no ha gustado nada al rey de la tierra batida: “Ya en Mallorca las probé y con sol eran lentas. Aquí son una piedra. Es la primera vez que esta marca (Wilson ha sustituido a Babolat)
Sí echa de menos “un clima adecuado, condiciones de juego más razonables a nivel de frío y juego, bola y demás. Y alegría, que nos gusta a todos, en la vida general y no sólo en el tenis. Echo de menos un clima de fiesta”, señala el doce veces campeón sobre un Grand Slam que se disputará prácticamente en familia. Un ambiente cada vez más cercano a un US Open que se disputó a puerta cerrada en Nueva York ●
hace pelotas para Roland Garros, y hay mucha cosas que mejorar y el torneo lo revisará después de este año. La salud va por delante, para hombros y codos puede ser peligrosa”, comentó.
Nadal analiza una situación que