Toca una noche grande
Anoeta quiere vivir un triunfo de Champions que sirva como golpe sobre la mesa: el Villarreal estaría a 8 Imanol dispone de todos menos Sadiq para ganar a un grande en casa por segunda vez en su etapa
A la Real le toca vivir una noche grande con y ante su gente. Todo encaja. El momento del equipo, con siete de nueve puntos posibles y una ventaja más que considerable para proteger la cuarta plaza respecto al quinto, sexto y séptimo. Son cuatro partidos de distancia con el séptimo y son cuatro las victorias que busca encadenar consecutivamente como local tras hacerlo ante el Elche, Getafe y Rayo.
Sin embargo, no gana al Real Madrid en Anoeta desde hace cuatro visitas, en la 2018-2019. Pero puntuar ante los de Ancelotti significaría casi asegurar la cuarta presencia consecutiva en competición europea, igualando el récord histórico del club. También han sido cuatro las veces en las que el club donostiarra ha jugado la máxima competición continental y esta, de producirse, sería la número cinco, como cinco puntos saca al Villarreal, quinto en la tabla, y cinco jornadas restarán pa
ra acabar la Liga tras el encuentro de hoy. Todo fluye entre el cuatro y el cinco, que casualmente son los puestos por los que parece que peleará la Real tras los pinchazos de Betis y Athletic. Y por eso también luchará esta noche en Anoeta.
Enfrente un Real Madrid pasivo en defensa y deslumbrante en ataque pero que está con la cabeza en todas las competiciones menos la Liga. Los de Imanol tratarán de aprovecharse de ello y, junto al calor de un público que apunta a llenar
el estadio pese al terrible horario, lograr romper con la ‘tradición’ de que los equipos de Imanol no ganan a los grandes. Ya compitió de manera sublime en el Bernabéu (0-0) y en el Camp Nou en Copa (1-0), pero ahora toca hacerlo en casa. Para compensar los casi sí pero no de las noches ante la Roma, el propio Barça y Madrid en los últimos años, Leipzig o Betis. La Real es más que capaz de hacerlo, más aún con las sensaciones recuperadas tras el cambio de dibujo. Un partido de ritmo alto debería beneficiar a los locales.
Con todo ante un rival con bajas
Imanol podrá elegir. Primero porque tendrá a disposición a 24 futbolistas sanos, y segundo porque pese a la carga de partidos, le esperan 12 días sin competición después. Aún queda jugo que exprimir. Las buenas sensaciones con el 4-3-3 indican que será el esquema elegido y que, por tanto, Brais o Merino, salvo que Silva no esté tan bien como el club ha afirmado, empiecen desde el banquillo. Atrás Gorosabel podría adelantar a un Aritz a medias, mientras que arriba el único ‘titular’ que teme por su sitio, a priori, es Oyarzabal por el momento de Barrenetxea. Sorloth y Kubo volverán al once salvo sorpresa.
Por su parte, los blancos contarán con las bajas importantes de Modric, Vinicius, Camavinga y Mendy. Además de Militao y Camavinga que, entren finalmente