Dirigir en la pista, dirigir en el despacho
Núria Martínez y Laia Palau repasan su primer año ejerciendo de directoras deportivas
Las trayectorias profesionales de Núria Martínez (Mataró, 1984) y Laia Palau (Barcelona, 1979) se cruzaron por primera vez en el Universitari de Barcelona hace más de dos décadas. Ambas bases compartieron vestuario bajo la tutela de Carme Lluveras y consiguieron su primer título liguero vistiendo de azulgrana (2003). Cada una siguió su curso y se reencontraron primero en el Ros Casares (201011) y más adelante en el Girona (2018-20).
Con más de veinte años de baloncesto a sus espaldas, Palau y Martínez dejaron en 2022 la batuta de directoras de orquesta en la pista para pasar a ser las compositoras de sus óperas primas: el Spar Girona y el Barça Santfeliuenc, respectivamente. Un primer año ejerciendo de directoras deportivas que han encajado con el mismo espíritu de liderazgo que las caracterizaba sobre el parqué.
Martínez aterrizó en el Barça CBS tras su paso por el Sant Adrià el curso anterior (2021-22) cuando las azulgranas se jugaban el ascenso a Liga Femenina Endesa. Tras conseguir el objetivo, la catalana colgó las deportivas y no lo dudó cuando le ofrecieron dar el salto a los despachos. La dirección deportiva no era el primer paso de Martínez fuera de las pistas, la exjugadora ejerce también de entrenadora del 3x3 de la selección y está activamente implicada con la cantera. “Llevaba una larga trayectoria como jugadora y me llegó la oferta cuando estaba terminando mi año en el Barça. Al principio fue difícil porque como jugadora tenía muy claro mi rol y, pese a que has vivido muchas de las situaciones como profesional, al dar el salto debes enfocarte en facetas a las que no estás acostumbrada”, indica.
Todo ello siendo la jefa de un bloque de jugadoras que apenas unos meses antes eran sus compañeras: “Creo que asumí el nuevo rol bastante rápido y he intentado marcar distancias en mis funciones. El hecho de haber compartido vestuario con muchas de las jugadoras probablemente ha sido un factor que en algunos momentos ha sido beneficioso”.
El conjunto azulgrana hizo historia este curso tras llegar a disputar la Copa de la Reina y las semifinales de los playoffs de la Liga Femenina Endesa en su primer año en la máxima categoría. “Teniendo en cuenta que el presupuesto que teníamos era bastante reducido en comparación con otros equipos, creo que hicimos muy buen trabajo junto a Isaac Fernández para encontrar las figuras precisas”.
Martínez no ha estado exenta de navegar momentos complejos. Bajas a mitad de temporada, comunicarle a una jugadora que debe dejar de formar parte de la disciplina del club e incluso la bifurcación de ideas entre el Santfeliuenc y el Barça respecto a quién será el entrenador el próximo curso, algo nada fácil de gestionar. “Ha habido algunos momentos complicados, pero creo que los hemos sabido manejar. El embarazo de Itziar Llobet lo afrontamos de manera muy natural, que es como debe ser. Al final no deja de ser una baja y se debe plantear así y normalizar la situación. En cuanto a decirle a una jugadora que no cuentas con ella, nunca es fácil. Pero si lo haces siendo consciente de que es la mejor decisión para ambas partes, tampoco debe ser algo traumático”.
Annus horribilis en Girona
Laia Palau sigue de luto. Tras apartarse de las pistas con 42 años, la de Barcelona entonó su nuevo puesto junto a Pere Puig quien, tras años ejerciendo de director deportivo del Spar Girona, quería bajar revoluciones. Tal es la adicción por el baloncesto de Palau, que a ese nuevo empleo le sumó el de ‘team manager’ de la selección absoluta bajo el liderazgo de Miguel Méndez y la dirección del nuevo proyecto de cantera junto al Bàsquet Girona.
“Todo se gestó la temporada pasada. Recuerdo que perdimos las semifinales de liga un jueves y el lunes ya estaba en la oficina. Se juntó todo (cantera, selección y dirección deportiva) y me tiré un poco a la piscina. Al final en el club siempre ha estado Pere (Puig) que tiene un control muy amplio de todo y me ha tutorizado. Creo que no era del todo consciente de lo que significaba, pero ha sido algo que he intentado hacer a mi manera”, expone.
Malabares laborales a un lado, nadie podía prever lo que se avecinaba en el equipo gerundense este curso. La dificultad para fichar a jugadoras norteamericanas, una baja crucial un día antes de empezar la pretemporada, traspasos a mitad de curso y una concatenación de lesiones de gravedad que condicionaron los objetivos: “Ha sido un máster. Creo que nadie ha vivido una temporada tan complicada como la nuestra. He llegado a fichar a cinco jugadoras en medio de la temporada”, sostiene.
Al igual que Martínez, Palau pasó a ser la jefa de quienes habían sido sus compañeras de equipo apenas unos meses antes. “Esto de separar… Lo llevo mal. Estas cosas las tengo que aprender y es lo que más me cuesta. Lo que más echo de menos es el vestuario y la relación con las compañeras. No tanto la adrenalina, sino el sentirme parte de un grupo y de un equipo. Al final, para muchas de ellas he sido alguien a quien acudir a pedir consejo en momentos complicados y ahora, de golpe, te tienes que separar”
Martínez: “Asumí el nuevo rol bastante rápido y he intentado marcar distancias”
Palau: “Lo que más echo de menos es el vestuario y la relación con las compañeras”
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El Valencia Basket anunció ayer el regreso al club con ficha del primer equipo de la exterior Claudia Contell, tras su cesión esta temporada al Hozono Global Jairis.
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