El Atlético, de vendaval a pedir la hora
Tras un gran primer tiempo con dos goles y un penalti fallado, el equipo de Simeone acabó sufriendo ante un Betis que hizo lucirse a Oblak
El Atlético de Madrid hizo valer su habitual fortaleza en el Metropolitano para conseguir una sufrida pero importante victoria ante el Betis que le permite seguir avanzando en la búsqueda de su objetivo principal: disputar la Liga de Campeones. Los colchoneros fueron un vendaval en la primera parte, se marcharon al descanso con ventaja de dos goles e incluso se permitieron el lujo de fallar un penalti, pero la entrada de William Carvalho en el segundo le cambió la cara a los andaluces, que estuvieron muy cerca de darle un susto a los madrileños. Oblak lo evitó.
Con muchas urgencias llegaba el equipo de Simeone después de su contundente eliminación copera y de haber ganado sólo uno de sus últimos siete encuentros entre todas las competiciones. Lo contrario que un conjunto verdiblanco que no conocía de derrota en sus cinco choques anteriores.
Hizo tres cambios el Cholo en su alineación con respecto al choque del torneo del KO ante el Athletic Club, dando entrada a Gabriel Paulista, Pablo Barrios y Memphis Depay, este último para acompañar a Morata en punta ante la ausencia del lesionado Griezmann.
El Atleti salió presionando arriba con intensidad y producto de esa actitud, estuvo a punto de adelantarse a los cuatro minutos tras robar De Paul el balón en el área contraria y acabar disparando al exterior de la red. Perdonó el conjunto rojiblanco la primera pero no la segunda. Volvió a fallar Bellerín en la salida del balón y el Atlético trenzó una jugada que acabó con centro de Memphis y rebote final que hizo que entre Pezella y Rui Silva el balón acabara entrando en propia puerta.
Momento Morata
El Atlético estaba a tope. Memphis tuvo el segundo en un mano a mano que terminó con disparo al cuerpo de Rui Silva y Morata reclamó justo después un penalti de Riad.
El Betis se encontraba aturdido, desbordado. Y llegó una segunda jugaba polémica. Morata regateó a Rui Silva y fue derriba- do. Soto Grado señaló fuera de juego previo. Tras revisar la acción, rectificó su decisión y pitó penalti. Lo lanzó Morata y lo detuvo el meta bético. No sólo la pena máxima, sino también los tres intentos posteriores del delantero del Atlético. Una jugada increíble.
La primera noticia que dio el Betis
en ataque fue un disparo centrado de Cardoso que atajó Oblak sin problemas. Coincidió con el empeoramiento de las condiciones climatológicas. Mucha lluvia y algo de granizo cayó sobre el Metropolitano. Rodri también probó a cinco del descanso pero encontró a Gabriel Paulista. Lo mismo le
pasó a Memphis poco después, en este caso con paradón de Rui Silva. Pero el meta ya no pudo hacer nada en la acción inmediatamente posterior. Sacó junto al palo el disparo de desde fuera del área de De Paul pero no el rechace que Morata envió a la red, reencontrándose con el gol tras ocho partidos sin
anotar.
Golazo de Carvalho
Movió banquillo Pellegrini en el segundo acto dando entrada a William Carvalho y Guido Rodríguez, El Betis mostró otra actitud, con mayor dominio. Y acortó distancias en el minuto 62’ con un espectacular disparo de William Carvalho desde fuera del área.
Tras el golazo, fue Simeone el que cambió piezas, dando entrada a Saúl y Nahuel Molina por Koke y De Paul. El partido entró en una fase de alternativas, pero era el Betis el que seguía apretando. Si en el primer tiempo fue Rui Silva el que evitó males mayores para los suyos, en este tramo le tocó el turno a Oblak. Bloqueó primero un disparo de Ayoze y sacó después una mano milagrosa a chut de Guido Rodríguez que acabó con el balón en el palo.
Visto el panorama, el técnico rojiblanco decidió reforzar su entramado defensivo. La entrada de Savic por Morata fue toda una declaración de intenciones. Y consiguió frenar la sangría, no sin sufrimiento, para acabar atando un triunfo reparador tras los últimos resultados