A toda velocidad
La cuarta etapa de la Volta se decidió al sprint y el neerlandés Marijn van den Berg fue el más rápido Los favoritos se tomaron la jornada a modo de descanso con el único fin de llegar de una pieza a Lleida
Cierto es que a una etapa de las características que tenía la jornada de ayer se la suele calificar como de transición, ya que queda ‘en tierra de nadie’ después de la dureza de la montaña y dado su propio recorrido, pero a la hora de la verdad, cuando hay que subirse a la bici y dar pedales, no son tan fáciles como pudiera parecer. Primero porque en cualquier jornada puede suceder cualquier cosa y después porque acostumbran a ser uno de aquellos días en la oficina en los que el trabajador casi sin darse cuenta ya tiene que cerrar el ordenador una vez finalizada su jornada laboral porque se ha pasado volando.
Y es que el cuarto asalto de la 103ª edición de la Volta Ciclista a Catalunya, de 169 kilómetros, con salida en Sort y llegada en la ciudad de Lleida, se disputó a toda velocidad, a una media de 46 km/h. Sólo presentaba mediado el recorrido una ligera dificultad montañosa, Port d’Àger, de segunda categoría, que no supuso un muro para casi ningún corredor, y a partir de este punto se lanzó la carrera, favorecido el alto ritmo por los tres sprints intermedios de Balaguer, Linyola y Les Borges Blanques antes de llegar a Lleida.
Los tres héroes del día
La propuesta de días como el de ayer, en los que los corredores llamados a hacer grandes cosas en la general se ‘borran’ y en la que todavía pesan en la mente las dos duras etapas finales y decisivas del fin de semana, son aprovechadas por los ciclistas caza etapas. Y cuando uno piensa en un corredor de estas características el primero que le viene a la cabeza es el belga Thomas de Gendt (37 años), que este año se retira del ciclismo, al que se le han sumaron el noruego Idar Andersen y el pamplonica Urko Berrade.
El corredor del Equipo Kern
Pharma fue el primero en quedarse del trío de cabeza, cuando ya casi la diferencia con el pelotón estaba a punto de bajar de los dos minutos. De Gendt aceleró en plena recta y ésta se le hizo un muro para el corredor farmacéutico, que al menos tuvo el consuelo de ser elegido el ciclista más combativo del día tras las votaciones de los aficionados.
No iban a durar muchos kilómetros más en cabeza de la etapa De Gendt y Andersen, siendo neutralizados 30 kilómetros después. El veterano Luis Ángel Maté (39) aprovechó el último sprint intermedio de Les Borges Blanques para tener sus minutos de gloria. Fue cazado a 8 kilómetros de meta, cuando los equipos de los sprinters ya olían la recta de meta, pero al menos lució los colores naranjas de su equipo, Euskaltel-Euskadi.
El equipo Ineos con Geraint Thomas y Egan Bernal fue el que lideró más kilómetros la aproximación del pelotón a la capital de la ‘Terra Ferma’. La clave, sortear el peligro de las rotondas y saber negociarlas bien. Uno de los equipos que mejor lo hizo fue el estadounidense EF Education-Easy Post, para que después su corredor Marijn van den Berg se impusiera por fuerza en las calles de Lleida, donde la Volta llegaba tras once años de ausencia. Tras él, el belga Arne Marit y del letón Emïls Liepins. Primera victoria de la temporada y cuarta de su carrera profesional para Marijn van den Berg, que acaba contrato con el equipo educacional inglés el próximo 31 de diciembre.
Hoy Tadej Pogacar defenderá su maillot de líder en una quinta jornada en la que la fuga tiene más opciones de llegar a meta. Tras partir de Altafulla pone rumbo a Viladecans después de dos puertos de 2ª y con el sprint intermedio de Sant Vicenç dels Horts a las puertas de Viladecans, una de las dos llegadas inéditas de esta Volta