Hamza, ‘siempre positifo, nunca negatifo’
A Louis van Gaal le encantaría conocer a este marroquí al que el baloncesto ha cambiado su vida
Hamza Driouich es un entrenador de origen marroquí del VIVE El Masnou, el club de basket donde se formó Ricky Rubio. Te aseguro, Louis, que es un tipo tan carismático y querido que sólo así se entiende que haya conseguido movilizar al club, los sponsors , El Masnou y la Federación Catalana de Basket para organizar un viaje a Casablanca. Viajará con técnicos del club y formarán a entrenadores marroquís para lograr que a través del deporte, niños y niñas desfavorecidos tengan una oportunidad en la vida. Louis, Hamza no lo tuvo fácil. De pequeño, en el colegio se sentía diferente, era el único de origen magrebí y las diferencias culturales, religiosas, socioeconómicas le llevaron por el mal camino.Optó por la rebeldía... hasta que se encontró con el baloncesto y con los valores que emana el deporte. Bueno, la realidad es que se topó con un entrenador, Xavi Sánchez, que decidió castigarlo en el basket hasta que cumpliese en la escuela. En el instituto era rebelde y problemático, en el basket era el más luchador. Pero el entrenador le hizo entender que tenía que esforzarse en todas las facetas de la vida, no sólo en el baloncesto. Su vida cambió, Louis. Ahora con 20 años estudia Económicas y lidera ‘proyecto Hamza’.
Hamza, Louis van Gaal tampoco lo tuvo fácil en la vida. Con 11 años falleció su padre y creció sin esa figura paterna tan importante. Con 18 años, conoció a Fernanda Abbes y se enamoró locamente de esta muchacha alegre de 16 años con el que tuvo claro viviría toda la vida. Con Fernanda tuvo sus dos hijas, Renata y Brenda, era inmensamente feliz con su carrera como técnico innovador y exitoso hasta que un cáncer de páncreas e hígado se llevó su vida. La lucha contra el cáncer fue durísima y estuvo salpicada por momentos de una crueldad tan extrema como cuando se encontró una pancarta en el campo del Feyenoord donde los vándalos ultra escribieron ‘Van Gaal tiene una perra con cáncer’. Louis lloró tanto la muerte de su mujer que pensó nunca nada le haría sentirse tan infeliz.
Este último mes, Hamza, Louis enterró a su hermana menor y vio como la vida de su hija se resquebrajaba por la muerte repentina de su marido, el yerno de Van Gaal. Truus, la actual mujer de Louis, a la que conoció en la selección ‘oranje’, ha sido su principal apoyo y la que más le ha insistido en que siga viviendo el fútbol, que ese año sabático sea sólo para recuperar fuerzas, sabe que Van Gaal es feliz formando futbolistas, formando personas. Van Gaal fue para Carles Puyol como Xavi Sánchez para ti, Hamza , el técnico que confió en él y que frenó su traspaso al Málaga para quedarse en el primer equipo azulgrana.
Zapatillas de basket y calcetines. Es lo que necesitan ahora en el ‘proyecto Hamza’ para llevar a Casablanca en un viaje que te encantaría hacer, Louis, con Hamza y su eterna sonrisa