Deulofeu encontró la madurez en el Milan
Menos anárquico y más solidario, ha aprendido a jugar para el equipo sin prescindir de su talento individual
Gerard Deulofeu arrancó la temporada en la Premier League como un tiro, pero muy pronto se apagó. Ronald Koeman le dio la titularidad en los dos primeros partidos ligueros en agosto. Aunque fue sustituido a media hora del final, parecía que la llegada del técnico holandés al banquillo de Goodison Park iba acompañada de una apuesta por el talento del de Riudarenes, una especie de conexión azulgrana que necesitaba tras temporadas irregulares en el propio Everton y en el Sevilla 2014-15 de Emery. Buenos momentos puntuales, alguna acción maravillosa para el recuerdo, pero desapariciones de ciencia ficción.
Esta vez las sensaciones eran mejores y el Everton sumaba 4 de los primeros 6 puntos, pero se repitió la historia y misteriosamente comenzó a desaparecer del once inicial. Ya solo fue dos veces titular más: en el Etihad Stadium ante el Manchester City (1-1) y en la derrota ante el Watford (3-2), el único encuentro completo que disputó. Se mantiene la duda de si es propenso a bajar los brazos cuando vienen mal dadas. Los entrenadores siempre comienzan contando con él por una cuestión de calidad, pero cambian de idea cuando tácticamente tiende a la anarquía, olvidándose de recuperar la posición o de presionar arriba, más allá de que esté acertado en la toma de decisiones con el balón.
Koeman, comprensivo
Entrar como suplente en 7 partidos más de Premier le supo a poco y el propio Koeman le invitó en enero a irse cedido. Y apareció el Milan para fortuna de Deulofeu. Allí no solo fue titular en 16 de los 17 partidos de Serie A que jugó, sino que además fue protagonista con 4 goles, 3 asistencias y actuaciones portentosas en ataque con las que se ganó el cariño de sus aficionados y la confianza de Vincenzo Montella, quien además logró que el catalán se aplicara en las tareas que siempre ha descuidado: ayudar a su lateral en defensa, recuperar la posición tras pérdida... Fue muy intenso en todos los sentidos. Y más regular que nunca. Aprendió lo que le han dicho desde niño, que el fútbol es un deportes colectivo, no individual. De todo ello tomó nota Julen Lopetegui, que se lo llevó a la selección absoluta, irrumpiendo en un amistoso de prestigio en Francia, provocando el penalti del 0-1 y logrando el 0-2. Y en la sub-21, quizás algo cansado tras una temporada exigente en todos los sentidos, en la que ha sido padre, también ha sido mucho más solidario.
“He cambiado mucho, como persona y como jugador. Soy mucho más maduro, mucho más paciente. Sé lo que tengo que hacer en cada momento y al final salir de tu país y vivir experiencias en vestuarios de categoría y con jugadores de los que aprendo, me ayuda a coger experiencia. La verdad es que he cambiado mucho”, comentó Deulofeu recientemente, admitiendo esa transformación que definitivamente le lleva de regreso al Barça
Ha sido padre, algo que también le ha ayudado a ser más paciente
El curso lo comenzó de titular en el Everton, pero Koeman dejó de contar con él