A RITMO RÉCORD
’Feli’ López vive la pesadilla de una retirada en una jornada con otros dos abandonos seguidos en la central Federer, profesional masculino con más partidos ganados en Wimbledon, 85, superando a Connors
El maleficio que se apoderó ayer de la pista central no pasó de ser una anécdota porque benefició a dos santos y seña de Wimbledon, el heptacampeón Roger Federer y el tres veces vencedor Novak Djokovic. Los recientes dominadores de los ATP sobre hierba de Halle y Eastbourne apenas de dejaron ver en la ‘Catedral’ porque sus oponentes se marcharon antes de tiempo. El ucraniano Alexandr Dolgopolov duró 42’ al resentirse de una lesión de tobillo y finiquitar la cita con ventaja del suizo por 6-3, 3-0. Previamente, el serbio se había metido en segunda ronda en 40’, ya que Martin Klizan dijo basta por molestias en una pantorilla con 6-3 y 2-0 del serbio.
Sin embargo, la tercera retirada de la jornada, en la cancha 16, sí se cobró como víctima a otro de los destacados de la gira previa en césped, el finalista de Stuttgart y después brillante ganador del torneo de Queen’s, Feliciano López.
En la misma ciudad, Londres, el toledano, 35 años, pasó en apenas dos semanas de cumplir un sueño en Queen’s, una de las citas de más tradición y prestigio del circuito, a vivir una amarga pesadilla en el All England Club. “Es una putada”, resumió ‘Feli’ el inesperado incidente. Se presentó ante el francés Adrian Mannarino considerándose en condiciones óptimas, pero de repente, fuera por el desgaste de competiciones anteriores o una mera cuestión de fortuna adversa, apareció un dolor en la planta del pie izquierdo que llevó al españo a tomar la raqueta y la bolsa e irse cuando no había nada que hacer. El físico no acompañaba, y se estaba reflejando claramente en el marcador, con 5-7, 6-1, 6-1 y 4-3 con saque para el galo.
“Antes del partido estaba perfecto y ha sido de repente. No ha sido por ningún gesto concreto ni nada. Pensaba que iba a ir a mejor por el antiinflamatorio y si calentaba un poco... Pero en ningún momento he notado mejoría alguna”, explicaba ‘Feli’. Pidió asistencia concluida la segunda manga, el ‘trainer’ manipuló el pie izquierdo, pero ni esta acción ni la pastilla ayudaron.
“Es duro, pero a veces en la vida hay cosas que uno no puede controlar, y que me pase esto justamente hoy es una putada, porque venía con mucha ilusión de jugar aquí y tampoco sé cuantos Wimbledon más voy a jugar”, lamentó ‘Feli’, uno de los ilustres veteranos del ATP Tour y que registra como mejor resultado en el AELTC tres presencias en la ronda de cuartos de final.
En otra era quizás 35 años se podría interpretar como una edad cercana a la retirada, pero los treintañeros triunfan actualmente, como lo está haciendo su compañero de generación Roger Federer, que también va camino de festejar el 36 cumpleaños.
Campeón del Open de Australia, firmó un doblete en los Masters 1.000 ATP Indian Wells-Miami y se permitió el lujo de dejar de lado el periplo en tierra batida en aras a llegar perfecto al que es “el principal objetivo de la temporada desde su inicio”, Wimbledon.
Ansia una octava corona, romper el equilibrio a siete con William Renshaw y Pete Sampras. Ayer sumó otro récord en su jardín, firmó su victoria 85, convirtiéndose en el profesional masculino con más encuentros ganados en Wimbledon, dejando atrás los 84 de Jimmy Connors.
El de Basilea se las verá mañana con el serbio Dusan Lajovic, cuyo nivel nada tiene que ver con el de Novak Djokovic (su próximo rival será el checo Pavlasek), con quien bromeó en el vestuario. “Sabía que no iba a ocurrir, pero le dije a ‘Nole’ que deberíamos disputar un set de exhibición. Nunca había visto algo así, dos retiradas consecutivas en la central, una lástima para el público”