Con la cartera llena a los 24
Naufragio australiano con Tomic declarándose “aburrido” y jugando “por dinero”
Cuartofinalista de Wimbledon 2011 con 18 años, seis más tarde se confiesa “aburrido” de tenis. Llamado a ser figura, ha acaparado más atención por los escándalos, incluidos los de su padre John, que dejó el taxi que conducía para dedicarse a entrenar en este deporte, que por sus resultados. Bernard Tomic forma parte de los ‘bad boys’ australianos, club que incluye a Nick Kyrgios, de mucho talento desperdiciado. Por vez primera en la era profesional de Wimbledon, desde 1968, no habrá ningún jugador de ese país en la segunda ronda masculina. Lo vio desde la grada la antítesis, el ahora capitán de Copa Davis Lleyton Hewitt, que fuera nº 1 y reinara en el All England Club.
Batido por el alemán Mischa Zverev por 6-4, 6-3 y 6-4, Tomic, 24 años y 59 del ranking, aseguró que “el tenis ya no me satisface. Poder levantar un trofeo o hacerlo bien es algo que no me da ya ningún placer. Y es algo que he experimentado un montón de veces, llevo dos temporadas sin motivación alguna. Sí, me es igual si en el Open USA (próximo Grand Slam) hago cuarta ronda o primera”.
Tiene el futuro asegurado en el aspecto monetario, y lo subraya sin recato alguno. Es su motor deportivo: “Sé que jugaré otros diez años y que cuando acabe mi carrera no tendré necesidad de trabajar más”. Tomic se embolsó 35.000 libras por la derrota de ayer, unos 40.000 euros. En su palmarés profesional, con cero títulos y tres finales perdidas, acumula más de cinco millones de dólares sólo en torneos. Alguien le sugirió hacer una donación de su premio, y fue rotundo. “Si le pedís a Federer que done sus 500 millones de dólares, ¿qué pensáis que hará? Todos trabajamos por dinero. Quizás cuando tenga 34 años empezaré a hacer donaciones. Si Roger (Federer) y Novak (Djokovic) lo hacen, y lo haré sin problemas”. El tenis como vehículo de llenar la cartera