MOVIDA EN UCLA
United y Real Madrid comparten instalaciones de entrenamiento y están enfrentados por su uso Susto para los blancos por una amenaza de bomba que desalojó la universidad donde se ejercitan
Real Madrid y Manchester United están a la greña por el uso de las instalaciones deportivas de la universidad de Los Angeles (UCLA), donde ambos realizan este mes de julio su stage de pretemporada, según apuntan desde Inglaterra. Hay conflicto por los horarios de uso de los campos de entrenamiento y también hubo rivalidad para escoger el alojamiento.
Tanta es la tensión entre ambos que en la organización del torneo que los dos clubs van a disputar en Los Angeles, la Champions Cup, han calificado la situación como “pesadilla”.
El United de José Mourinho se hospeda en el hotel de cinco estrellas Montage, con personal también en el Beverly Wilshire, considerado como uno de los mejores de la ciudad. Mientras, el Madrid de Zidane está en el Hotel Beverly Hills. Apuntaba ayer ‘The Sun que el mal rollo entre ambos clubs viene de 2009, cuando el Real Madrid se llevó a Cristiano Ronaldo de Old Trafford. Más tarde, hace solo dos veranos, nueva polémica por otro jugador: David De Gea, al que el club blanco ha tratado de llevarse desde entonces. Y este verano, ‘caso Morata’, con las conversaciones por el delantero blanco rotas finalmente. Todo ello da cierto ‘morbo’ de cara al partido que ha de enfrentar a ambos en el Santa Clara este próximo domingo.
Lo que sí que vivieron ambos equipos ayer es un susto en toda reglar por una amenaza de bomba que provocó la evacuación de decenas de estudiantes residentes en UCLA. Portavoces de la universidad indicaron que la amenaza de bomba se dio en uno de los centros recreativos de las instalaciones. Las autoridades explicaron al canal KTLA que se encontró un paquete sospechoso en el UCLA Sunset Canyon Recreation Center, situado a menos de un kilómetro del North Athletic Field, el campo donde el Real Madrid
lleva a cabo la pretemporada.
La universidad evacuó tres residencias de estudiantes localizadas en el interior del campus tras recibir una amenaza por vía telefónica, afirmó Brian Haas, portavoz de la universidad. “Las medidas que hemos tomado son por precaución en este punto”, añadió en declaraciones al diario Los Angeles Times