El Barça después de Neymar
Llevo unos pocos días en Francia, al norte de París y, aparte del fresco que hay por aquí, 20 grados, el tema futbolístico es la cuestión Neymar. Diría que la posible llegada del brasileño se ve como muy beneficiosa para el fútbol espectáculo, la asistencia a los estadios y el valor de los derechos televisivos. Me dicen que los clubs locales ven cómo muchos de los partidos del campeonato tienen poco valor porque hay pocos equipos con estrellas como Neymar y piensan que esto atraería incluso a otras figuras emergentes –vean el desmantelamiento del último campeón, el Mónaco–.
De Barcelona me llegan noticias, confusas pero ciertas, sobre que la gente del Barça, situados hasta hace unas horas físicamente en Estados Unidos, deben ver por un lado que ya la cosa no tenga remedio y por el otro piensan aquello de que en fútbol todo es posible hasta el último momento. La hinchada ya está prácticamente convencida de que esto no tiene remedio y me dice uno por teléfono: “Això ja està fet i beneït”. Parece que incluso la cantidad enorme de ‘cash’ ya salió de Doha y está en un banco de París. Porque, claro, el PSG es muy potente, pero no es posible que disponga, como si nada, de 222 millones muertos de risa en el banco, más lo que hayan pactado con el padre, más lo de Pini Zahavi...
Por cierto, Pini es un veterano agente israelí que hace años está instalado en Londres y que en su época me hizo varias propuestas, siempre honestas, para que Rivaldo fuera traspasado al United. Como yo sí soy muy del Barça –del Barça, digo, no soy de ninguna directiva en especial y siempre digo lo que creo que es de verdad–, Pini no consiguió su propósito y
Rivaldo se quedó en nuestro club, aunque al cabo de poco tiempo se le dejó libre y se fue al Milan. Son cosas que pasan en el Barça. El mismo Pini Zahavi es el que consiguió una carta del United en la que le decía que el club estaba dispuesto a negociar a Beckham, cosa que aprovechó el tándem Laporta-Rosell para, en plena campaña electoral, decantar el voto mayoritario. Mientras, yo, también en campaña, iba denunciando y diciendo que el dúo
‘Becks’-‘Spice’ ya había firmado por el Madrid. Era la verdad, peor nadie quiso creerla. Así se escribe a veces la historia, sobre todo si es fútbol y Barça. Pini, por cierto, aprovechó la ocasión y la ayuda prestada para colocarnos al portero turco Rustu, que prácticamente no jugó.
Ahora parece que Pini es el que ha ligado la operación con el PSG. Dicho todo esto, me da la impresión de que el club en general está dolido y el público aún más. Me parece que ya a nadie le importa que se vaya el brasileño.
Estoy asustado de los nombres de jugadores que se van anunciando como posibles fichajes. Es evidente que este dinero se invertirá. El año pasado, una cantidad parecida nos trajeron un titular,
Umtiti, y siete que aún no se han ganado el sitio. Si los mismos que tomaron estas decisiones deciden ahora, el futuro puede oscurecerse por momentos. Espero que no sea así
Veo fuera al brasileño y estoy asustado por los nombres para reemplazarlo