Farah firma otro oro descomunal
Dominó su último 10.000 antes de pasarse a la maratón
El buque insignia de la armada británica se llevó ayer el primer oro del Mundial de Londres. Con los brazos arqueados sobre su cabeza haciendo el popular ‘Mobot’ y con una sonrisa que no le cabía en la cara celebró Mo Farah su triunfo en el 10.000. Tercer título mundial en esta distancia y el más emotivo de todos por ser el último de su carrera antes de dedicarse a correr maratones. Por un momento olvidó la presión sobre su técnico Alberto Salzar, ausente en este Mundial e investigado por la USADA por las sospechas sobre el uso de métodos dopantes.
La carrera comenzó al ritmo impuesto por los africanos. Farah siguió el guión habitual de mantenerse en la cola del grupo. El ritmo fue vivo desde el principio con el paso por el primer 1.000 en 2’39”48. El británico, que domina la situación como nadie, subió a la zona delantera del pelotón al paso por 4.000 para marcar de cerca a sus rivales.
El ecuador de la prueba se pasó en 13’33”72 con los africanos tratando de poner en apuros, sin fortuna, al campeón olímpico. A falta de dos kilómetros, un grupo compacto de nueve unidades quedaba por delante. Farah no se fue al suelo por poco tras chocar con el keniano Geoffrey Kamworor, pero en la última vuelta fue el campeón de siempre.
Sonó la campana del último 400 y de nuevo el británico de origen somalí casi se sale de la pista. A pesar del susto, al británico le quedaba una marcha en el cuerpo y dio un tiró espectacular a la salida de la curva fi- nal. El Farah de siempre, ga- nando con la táctica de siempre. Y le habían puesto a prueba, con un ritmo de meeting que le exigiñó correr en menos de 27 minutos para ganar (26’49”53) por delante del ugandés Joshua Cheptegei y el keniano Paul Tanui.
Todo recordó a lo vivdo en el mismo escenario cinco años atrás, también un 4 de agosto, een aquel esplendoroso ‘Supersábado’ olímpico que terminó con tres preseas de oro para el equipo británico de atletismo, entre ellas la primera de las cuatro que posee Farah.
Ya son siete las medallas (seis oros) que acumula en Mundiales, igualando a Haile Gebrselassie y deshaciendo la igualdad que mantenía con otro fondista histórico como Kenenisa Bekele. En el ‘coto’ de los 5.000 y 10.000 metros, Farah lo ha ganado todo, absolutamente todo, desde que fue ‘solo’ plata en los 10.000 del Mundial de Daegu, hace seis años