Tócala Gomes

ANDRÉ GOMES SE QUEDÓ en tierra de nadie la pasada temporada. No pudo alcanzar las excelentes espectativas que le atribuyen los técnicos y el público, aunque le reconoció su calidad, lo metió en el peligroso paquete que se dio en llamar ‘fondo de armario’. Formar parte del ‘fondo de armario’ en el Barça habiendo pagado una millonada no es nada aconsejable, pues es un salvoconducto para estar en el mercado o ser moneda de cambio. Sin embargo, Luis Enrique fue un valedor radical del portugués al igual que Robert Fernández. En abril el asturiano dijo que Gomes estaba rindiendo al 30% de su capacidad. “Imaginad al cien por cien”, alertó harto de sospechas. Su polivalencia jugando en los tres puestos de la media, de extremo y de lateral en la final de la Copa por emergencia y algunos arranques de potencia fueron muy ponderados y le salvaron del ojo público que siempre tuvo la mosca detrás de la oreja con el centrocampista.

PERO ALGO TENDRÁ GOMES cuando en esta pretemporada se ha ganado la confianza de Valverde que lo considera imprescindible en su proyecto y ha dado la recomendación de no traspasarlo. Con 24 años y con un agente hábil como Jorge Mendes , el luso es el jugador que tiene más salida de la plantilla. Como la temporada pasada, sigue siendo apetecido por Mourinho para formar parte de su potente United y por la Juventus, que no lo ha olvidado para lograr el sueño de la Champions aunque no hasta el punto de canjearlo por Dybala como señalaba ayer la prensa italiana.

LOS TÉCNICOS DIAGNOSTICARON que a la línea media le había faltado dinamismo y fuerza en la campaña anterior. De ahí el interés por el brasileño Paulinho por el que el Barça no está dispuesto a pagar los 40 millones que exige el Guangzhou Evergrande. Gomes tendría más competencia pero este es el año que debe hacer explotar sus condiciones para que sus defensores no queden mal