Mundo Deportivo

Los leones caen con claridad ante el Liverpool en Dublín

Iñaki Williams neutralizó el tanto inicial de Firmino pero Woodburn y Solanke sentenciar­on tras el descanso

- Alberto García Juan Echeverría (fotos)

En ocasiones, como ayer en Dublín, las previsione­s se cumplen. La fiesta era del Liverpool y el Athletic fue un invitado amable. Ya desde Bilbao porque, lógicament­e, tras la eliminator­ia europea, acudió con la segunda unidad. Escasa posesión de los leones, a los que les tocó correr detrás del balón y defenderse de los ataques de los reds. Tarde para pocas noticias nuevas. Williams igualó el tanto inicial de Firmino, pero en la segunda parte llegaron los goles de Woodburn y Solanke para el 3-1. Todo acabó como empezó. Con el “You’ll never walk alone”.

Ziganda afrontó el partidazo del Aviva Stadium con un once totalmente renovado con respecto al que sacó el billete europeo el jueves. Segunda unidad, con dos refuerzos. El de San José en el doble pivote y Williams arriba. Ambos entraron en la segunda parte con el Dinamo Bucarest. El resto de la alineación estuvo compuesta por Kepa bajo palos, en su segunda presencia del curso. Con Lekue, Bóveda, Núñez y Saborit en la defensa. Mikel Rico en la sala de máquinas junto al de Atarrabia. Con Aketxe de enganche. La banda derecha para Merino y la izquierda para Córdoba. Y el delantero bilbaíno en punta. Dibujo flexible, con ajustes sobre la marcha. Enfrente la noticia estaba en la ausencia de Coutinho en Dublín, desatando los rumores de su pase al Barça. Y con estrellas como Salah, Firmino o Milner sobre el tapete.

Bill Shankly, mito del Liverpool, entre cientos de frases célebres, dijo una vez que “algunos creen que el fútbol es sólo una cuestión de vida o muerte, pero es algo mucho más importante que eso”. Y también tiene cosas como la primera parte de Dublín. Con mayor dominio red, de largo, pero con tablas (1-1) al descanso.

En los primeros compases, la defensa rojiblanca se las vio y se las deseó para contener el ataque de los de Jürgen Klopp. Que se gustaban con diabólicas filigranas y combinacio­nes. En todas estaba el egipcio Salah, pagando en parte esos 42 millones que han ido a parar a la Roma por su fichaje.

Paredes y más paredes al borde del área. Dos de ellas finalizada­s por Origi. Las dos dentro del primer cuarto de hora. Una desviada a la derecha de Kepa y otra de cabeza alto en el segundo palo. Firmino también estaba en su salsa. Y en el minuto veinte llegó el penalti de Lekue al ariete red. Tan inocente e innecesari­o como real. Lo transformó el propio delantero brasileño. Kepa se lanzó bien a su derecha y tocó el balón, pero no evitó que el balón llegase al fondo de su portería. Justo premio a los méritos del Liverpool.

Paradas de Kepa

Salah pudo aumentar la cuenta casi seguido, pero el de Ondarroa detuvo su tiro cercano. Casi a la media hora, Williams le dio un buen pase a Aketxe, solo por la izquierda, pero remató desviado a la derecha de Mignolet de primeras. En la segunda jugada hubo cambio de papeles y de final. Asistió el medio de Romo y el ayer nueve bilbaíno batió por bajo al meta de los reds para el empate. Momentos en los que el Athletic por fin pudo respirar. Un paréntesis. Las dos últimas balas fueron de nuevo del Liverpool. Grujic arriba en un córner. Y Alberto Moreno, colaborado­r intermiten­te del billar a tres bandas, haciendo intervenir a Kepa.

A la vuelta de vestuarios, Klopp hizo diez cambios, únicamente dejó sobre el verde al cancerbero Mignolet. Kuko mantuvo su once. Con ese decorado distinto al Athletic se le abrían las opciones. Esos minutos posteriore­s fueron de tanteo, como un inicio de partido. Ahí en medio, Córdoba chutó con la zurda a las manos del meta tras un pase de Williams. Replicó Mané, que se encontró sólo tras un rechace, pero Kepa desvió a córner en una buena intervenci­ón. Pero un par de minutos después no pudo impedir el golazo de Woodburn con un zurdazo cruzado, un par de pasos dentro del área grande.

El Liverpool, con esa ventaja de FOTO: JUAN ECHEVARRÍA

nuevo, siguió empujando, sobre todo por el flanco izquierdo. A falta de veinte minutos para el final, Ziganda dio un poco de aire al equipo. Metió a Beñat, Villalibre y De Marcos por Rico, Williams y Lekue. Pieza por pieza. Sin cambios de posición. Susto con un despeje de Núñez al cortar un centro lateral desde la derecha que se fue a córner por muy poco.

Con poco fútbol sobre el césped, la diversión pasó en ese tramo por la salida de un espontáneo para hacerse un ‘selfie’ con Mané y con la ola en la grada del Aviva Stadium. Seguro que poco serio para Shankly. Pero los jugadores del Liverpool reclamaron su protagonis­mo. A lo suyo. Más llegadas. En una de ellas Solanke fusiló con la testa a Kepa para hacer el 3-1.

Dos últimos cambios, Sola por Aketxe y Balenziaga por Córdoba, para acabar prácticame­nte con dos puntas y Enric Saborit como interior por delante del de Zumarraga. Así bajó el telón en la fiesta del Liverpool

 ??  ?? Alegría entre los jugadores del Liverpool tras marcar uno de los tres goles al Athletic
Alegría entre los jugadores del Liverpool tras marcar uno de los tres goles al Athletic
 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain