Manyonga completa su redención de oro
El ex adicto a las drogas ganó la longitud
La longitud tiene nuevo héroe, Luvo Manyonga. El portentoso sudafricano, máximo favorito para llevarse la prueba, cumplió los pronósticos y voló más lejos que nadie (8,48 metros) para saborear por fin su primera medalla de oro internacional.
La épica apareció en el Estadio Olímpico de Londres y Luvo hizo posible lo que nadie esperaba en 2012, cuando su adicción al cristal de metanfetamina le llevó a tocar fondo y a apartar las zapatillas para rehabilitarse. Tras un duro camino, y con la muerte en accidente de tráfico de su entonces técnico, Manyonga rehizo su vida, se centró en el atletismo y tras lograr en los Juegos de Río una valiosa medalla de plata, afrontaba este Mundial como el escenario definitivo para confirmar los éxitos que muchos vaticinaban cuando le veían saltar en su etapa de junior.
Teas un primer salto nulo, Manyonga, de 26 años, dio en su segundo turno con el salto bueno de la noche, el que valió el oro con 8,48 metros, a 17 centímtros de su marca personal de este mismo año (8,65). Suficiente para conseguir el deseado título mundial porque únicamente el norteamericano Jarrison Lawson, segundo, puso en peligro su victoria con un último gran salto de 8,44 que llenó de incertidumbre a Luvo. El podio lo completaba otro sudafricano, Rushwahl Samaai, con un salto de 8,32.
Manyonga pertenece ya a una gran generación de atletas sudafricanos, comandados por los éxitos de Wayde Van Niekerk y Caster Semenya, que están copando las primeras posiciones y que marcaran una época en la historia del atletismo mundial