Giroud, inmortal
El francés, al que muchos ponían fuera del Arsenal, salió para callar las críticas una vez más y le regaló a los ‘gunners’ la primera victoria.
livier Giroud parece estar condenado a ser uno de esos delanteros que constantemente tiene que estar en entredicho para su afición. Es del club de estos futbolistas que, sin ser goleadores, hacen jugar mejor al equipo y ofrecen otras alternativas en ataque. No obstante, a estos tipos de jugadores se les da un valor mucho menor, porque al final lo que la gente quiere ver de un delantero son goles, por mucho que sus virtudes que le hacen estar ahí sean otras.
Arnséne Wenger ya cayó el año pasado en las demandas de afición y prensa y, ante la imposibilidad de encontrar a otro delantero, centró a Alexis Sánchez. Obviamente la jugada no le salió mal, el chileno es uno de los mejores jugadores del planeta y en la punta de ataque lo siguió confirmando. En la banda izquierda entró la sensación Iwobi, que poco a poco fue menguando sus buenas actuaciones mientras Giroud esperaba en el banquillo, sin siquiera rechistar, una oportunidad para demostrar su valía, siempre en entredicho, y lo hizo.
Este año la llegada de Alexandre Lacazette parecía el paso definitivo para deshacerse por fin de su compatriota. El ex del Lyon llegaba con el cartel de titular y era la apuesta del club, además de aterrizar en Londres con la vitola crack, al haber anotado 36 goles la temporada pasada. Sin duda un gran jugador, profundo, eléctrico y con hambre de gol. Todo lo que había estado pidiendo la afición del Arsenal. Y la pretemporada, con Lacazette de titular, lo corroboraba. Más el debut en Premier League, abriendo la lata contra el Leicester en apenas dos minutos.
Pero como siempre, con el partido en problemas, le tocó el turno a Giroud, el apagafuegos del Arsenal y de Wenger, que ejerció una vez más como tal. Le bastaron 23 minutos para anotar el gol de la remontada, con un cabezazo inapelable y una celebración de rabia, merecida y reivindicat iva como poco. Fue un
“yo también estoy aquí”. Y está y estará. Tras el partido, Wenger confirmó que contaba al cien por cien con Giroud para esta campaña, y no puede ser menos. Si el Arsenal quiere ganar y retener a futbolistas como Özil y Alexis Sánchez debe tener a los mejores jugadores, y el galo es sin duda uno de ellos. No es el delantero que más destaca, eso es una realidad, pero a veces uno no destaca porque hace que lo hagan el resto, y ese es el papel de Giroud dentro del Arsenal.
Wenger por fin tiene dos perfiles. Lacazette, el delantero cazagoles, rápido y con mucho olfato, siempre dispuesto a bajar al fango para pelear una pelota. Y, la alternativa, de momento, Giroud, todo clase, capaz de jugar a un toque y con una gran potencia aérea. Si el Arsenal quiere optar a algo esta temporada, necesita de él también, que siempre demuestra que es inmortal
Con la llegada de Lacazette su importancia en el equipo parecía menor