Un brasileño sin ‘toiss’
Paulinho relevó a Neymar en una presentación más sencilla y familiar
Paulinho Bezerra cogió ayer el relevo de Neymar convirtiéndose en el fichaje brasileño número 30 del Barça. Cuatro años después de la llegada del ahora delantero del PSG, Paulinho, como Ney, cumplía su sueño de vestir de azulgrana, aunque en unas circunstancias muy diferentes.
Sin el ‘glamour’ ni la dimensión mediática de Neymar, el estreno como azulgrana de Paulinho fue más discreto y familiar. A diferencia del delantero, que quiso compartir su alegría con sus más allegados y su decena de amigos, los famosos ‘toiss’, que adquirieron gran notoriedad aquel día, Paulinho disfrutó de su momento de forma más discreta.
Además de su esposa, Bibiana, que está embarazada de cinco meses y de mellizos, Paulinho optó por rodearse solo de sus agentes, Giuliano Bertolucci y Kia Joorabchian, además de su pareja de amigos con su hijo pequeño, además de su asesor de prensa, Cadu. En un día tan especial, al centrocampista brasileño le hubiera encantando poder contar con la presencia de sus dos hijos, Ana Beatriz, de 8 años y Benjamín, de 2 años, fruto de su matrimonio anterior, pero ambos se encuentran con su madre en Brasil.
Acorde con el papel discreto que le corresponderá tener en el campo, anteponiendo el colectivo a lo personal, Paulinho congregó a algo más de 3.000 personas en la grada principal del Camp Nou, a diferencia de los más de 56.000 seguidores que se dieron cita el día de Neymar. Además, ayer, aprovechando la presentación de Paulinho, hubo algún que otro aficionado que mostró su descontento hacia el presidente Bartomeu por la situación que está viviendo el equipo. Paulinho, ajeno a todo, acepta el desafío