Pérdida de la identidad
El Barça fue una sombra de lo que era y no mostró nada de lo que quiere ser
“Es la primera vez en nueve o diez años que he sentido que ellos han sido superiores”. Gerard Piqué habló tras la vuelta de la Supercopa de España de sus sensaciones sin saber todavía que las estadísticas y los análisis le daban toda la razón. El Barça fue inferior al Madrid. Se olvidó de dónde venía sin saber todavía hacia dónde va.
MENOS POSESIÓN TRAS 9 AÑOS
45,75 % del Barça y 54,25 % del Madrid. La última vez que el equipo azulgrana perdió la posesión ante el eterno rival fue en el
4-1 de la Liga 2007-08 en el Santiago Bernabéu, cuando se quedó en un
46,63%. Respecto a la ida de la Supercopa de España en el Camp Nou, la diferencia es muy grande: el domingo fue un 66,42 % para el Barça.
PÉSIMA COLOCACIÓN
La loable intención de Ernesto Valverde de revitalizar al equipo se plasmó en un 3-5-2 que, sin embargo, no funcionó por falta de automatismos. Los tres centrales, demasiado separados, no llegaban a cerrar los agujeros cuando Busquets, sin líneas de pase, perdía el balón ante la presión del Madrid. Los dos carrileros, Sergi Roberto y Alba, esperaban el balón avanzados y abiertos, dando la ventaja a sus marcadores para la anticipación. Y André Gomes y Rakitic no se sintieron cómodos como interiores centrados. Ni se ofrecían con claridad ni tapaban.
LA PRESIÓN ALTA, ANULADA
El nuevo Barça de Valverde mostró en la gira estadounidense la que iba a ser una de sus señas de identidad: la presión alta en la salida del balón del rival desde atrás. El Madrid lo sabía y en esta Supercopa de España ha tomado precauciones, eligiendo bien el primer pase, tocando en otras zonas y saliendo a veces con jugadores de rápida conducción.
MESSI Y SUÁREZ, AISLADOS
Los dos únicos delanteros hicieron la guerra por su cuenta contra cuatro defensas blancos, sin apenas combinaciones con sus compañeros. En labores defensivas, también el equipo quedaba roto, con las líneas separadas.
EL PESO DEL ADIÓS DE NEYMAR
Sí, no hay que mirar atrás, como dice Valverde, pero son muchos los que están aprendiendo ahora lo que significaba la presencia de un jugador como Neymar en el Barça. Siempre pidiendo el balón, encarando, haciendo retroceder metros a la defensa rival con su profundidad y permitiendo a su equipo subirlos y posicionarse más arriba. Ya lo dijo Sergio Ramos, su marcha es un alivio para el Madrid.
SIN FACTOR SORPRESA
Zidane pasó del 4-4-2 del Camp Nou a un 4-3-3 que desconcertó al Barça y a Valverde, que quería sorprender con su 3-5-2. Y fue al revés. En el 3 vs. 3 entre delanteros blancos y defensas azulgranas, ganó el Madrid, más vivo.
REACCIÓN TARDÍA
Hasta el minuto 50, y de forma forzada porque Semedo entró en el lateral derecho por la lesión de Piqué, no se modificó un plan inicial que hacía aguas. Con Semedo hubo cambio de dibujo y se pasó a un 4-4-2 que igualó fuerzas, antes de la entrada de Deulofeu por Gomes en el 72’ para acabar con un 4-33. En la segunda parte hubo mejoría.
LOS FICHAJES, SUPLENTES
Semedo y Deulofeu comenzaron en el banquillo, Marlon se quedó en Barcelona, Paulinho no llegó a tiempo y quién sabe qué pasará con Coutinho y Dembélé. La ilusión no se está renovando