El Barça sin Neymar
Ha empezado la Liga con muchos cambios y con tiempo para fichar. El Barça tiene la obligación de reforzarse para tratar de compensar la gran pérdida de Neymar. Quién le iba a decir a Valverde que en el primer partido de Liga iba a superar al Betis con un once sin Luis Suárez, Iniesta, Piqué y Neymar, que ya exhibe su extraordinaria calidad en París. El Barça, pese a los inconvenientes, ganó con autoridad al Betis y apartó temporalmente el pesimismo del entorno tras las derrotas en la Supercopa frente al Real Madrid.
Sin Neymar, el Barça pierde demasiadas cosas. En primer lugar frescura: su fútbol es natural, pura fantasía, hemos tenido la gran oportunidad de disfrutar durante unos años de su juego, sus goles y sus asistencias. Podía ofrecer espectáculo en cualquier situación del juego, como Messi. Luis Suárez había conseguido que ambos jugadores se llevasen bien, se buscasen y compartieran su juego. Eran complementarios, algo que no es fácil en jugadores con un ego tan pronunciado.
En lo táctico se ha perdido toda la profundidad que aportaba. Tanto es así que Luis Enrique tenía la posibilidad de jugar incluso con posesión en campo propio para después atacar a los espacios aprovechando la velocidad de Neymar, con pases de Messi, Iniesta o Piqué.
Lo único positivo de su salida es que nos da la oportunidad de ver a Deulofeu. Tiene grandes cualidades, juventud, potencia, gran golpeo y ganas de triunfar. Además, Messi ahora lo necesita como demostró ante el Betis.
A Valverde le han cambiado las cartas, él no ha participado en esto, por eso es muy injusto que se le cuestione antes de empezar la competición. Él es inteligente y seguro que encontrará su forma de jugar, su esquema táctico, y sino lo modificará en función de los refuerzos y sus características.
La salida de Neymar es un error histórico, como en mi época la de Maradona, que privó al Camp Nou de otro gran espectáculo. Son jugadores únicos