El Girona y sus viajes de Primera

Javier Galiano: “Viajar en tren tiene muchas ventajas logísticas para un equipo de fútbol”

El 26 de enero de 1862 llegó a Girona el primer ferrocarril, que le unió definitivamente a Barcelona por la línea de Maçanet. Así lo recuerda un artículo publicado por un periódico de la época, “Lo Gironés”, en su edición del 27 de enero de 1862: “A las 12 horas del día 26 de enero de 1862 la locomotora saludó los muros de esta Inmortal Ciudad… Al divisarse la locomotora se echaron al vuelo las campanas de la Santa Iglesia Catedral… A pesar de lo desapacible del día, pues toda la mañana llovió, estaba la estación y su avenida poblada de millares de personas, mostrando en sus semblantes la alegría por tan gran suceso. Por la tarde regresó el tren a Barcelona en medio del bullicio de la población”.

El 9 de enero de 2013, Renfe puso en circulación nueve trenes de Alta Velocidad que conectaron Girona y Barcelona, con extensión hasta Figueres (Alt Empordà). Desde aquel día, en apenas 37 minutos, los convoyes del AVE unen las dos capitales catalanas.

El pasado 6 de junio, el Girona FC, club fundado en 1930, logró el ascenso a la Liga Santander. Desde ese día, se ha subido al AVE con una única intención: seguir jugando en la categoría reina de la mejor competición del mundo.

Marc Muniesa, nacido en Lloret de Mar (Girona), ha regresado a La Liga para vivir la aventura del equipo de su tierra en la categoría reina. Pese a su juventud –acaba de cumplir 25 años– es todo un veterano. El defensa se forjó en las categorías inferiores del FC Barcelona. Llegó al primer equipo de la mano de Josep Guardiola, a pesar de sufrir una tremenda lesión en la rodilla que se lo puso difícil y, participó en la consecución de la Liga y la Copa de Europa de la temporada 2008-2009. También contribuyó al título liguero de la campaña 20122013 ganado por el equipo azulgrana. Las últimas cuatro temporadas jugó en el Stoke City de la Premier League, con el que ha disputado casi cien partidos. Muni, como le conocen en los vestuarios, lo tiene claro: “viajar en tren hace equipo”. Y lo explica: “es mucho más fácil relacionarte con los compañeros cuando viajas en un tren que cuando lo haces en un avión o en un autocar, por ejemplo. Es una simple cuestión de espacio, de movilidad”. En su caso, lo prefiere por un tema de comodidad. “Yo, si puedo escoger, voto por ir en tren”, asegura. Muniesa: “Viajar en tren hace equipo”

La comodidad es una de las razones principales por las que Muniesa aplaude la decisión del Girona de apostar firmemente por el uso del AVE para sus desplazamientos cuando el equipo disputa partido lejos de Montilivi: “Cuando viajas en tren basta con llegar cinco minutos antes a la estación y ya estás dentro del vagón. Eso no pasa en avión. Una vez en ruta, echas unas partiditas de cartas o te conectas al ordenador, vas al bar y te tomas un café, puedes estirar las piernas dando un paseo o descansar mejor porque los asientos son más cómodos que en la mayoría de los aviones. A mí me gusta mucho, la verdad”. El defensa catalán recuerda que durante su paso por Inglaterra, el tren era el medio de transporte más habitual. “Era muy raro viajar en avión”, comenta antes de aseverar que el AVE es mucho más cómodo que los vagones que usaba su equipo inglés para los desplazamientos.

Organizar un viaje de dos días para 35 personas, que es el grueso habitual de una expedición, no debe ser fácil. “Tiene sus complicaciones, ¡sin duda!”, resume con una sonrisa Javier Galiano, delegado del Girona desde hace diez años, cuando el equipo ascendió a Segunda. Galiano, toda una institución ya en el club, ha vivido muchos desplazamientos y por ello tiene clara su opinión. “Viajar en tren tiene muchas ventajas logísticas para un equipo de fútbol y más con las facilidades que nos da Renfe”. De entrada, les cede una zona para cargar el material y un vagón, normalmente en cabeza, para uso personalizado de la expedición. De hecho, el Girona lleva años viajando en tren, así que su delegado, el hombre mas importante en los desplazamientos, sabe de lo que habla.

Cabe recordar que además de los futbolistas –normalmente el entrenador convoca a 18 jugadores–, en la expedición también viaja el cuerpo técnico: entrenador, sus ayudantes y los analistas, unas 13 personas. Junto a ellos nunca falta el doctor y los fisioterapeutas, así como un nutricionista para controlar el menú en los hoteles; el utillero y el delegado. En el tren también suelen viajar los directivos que acompañan a la expedición, así como los responsables de comunicación del conjunto catalán.

“Somos toda una familia”, bromea Galiano. “Lo bueno de estos viajes es que llegamos diez minutos antes a la estación y ya está. Si vamos a Madrid, directos. Si vamos a Andalucía, igual. El problema es ir Galicia, pero peor lo tenemos cogiendo aviones”, avisa. El avión supone que los pasajeros lleguen dos horas antes, como mínimo, al aeropuerto, y el material mucho antes, a lo que se debe sumar el tiempo del vuelo, y organizar los autocares de recogida para los traslados.

Si los jugadores están encantados, los miembros del equipo técnico también apuestan por el tren, ya que aprovechan los cómodos desplazamientos para analizar a los rivales y trabajar en cuestiones tácticas. De igual manera, los médicos prefieren estos viajes, ya que incluso pueden aplicar tratamientos durante el camino. Además, a diferencia de un viaje en avión que conlleva fuertes cambios de presión, desplazarse en tren no presenta ninguna contraindicación.

Así es la aventura del Girona FC, un equipo recién ascendido a la mejor liga del mundo pero que ya hace años viaja… de primera.