‘Satisfaction’ con Ernesto Valverde
El técnico acabó con su talante con la crisis potenciada por los que querían controlar políticamente el club
Mick Jagger no puede ser más sexy. Mienten los que dicen que a sus 74 años se mueve en el escenario como nadie, Jagger no tiene edad, es eterno, descomunal. I Can´t Get No, Satisfaction para cerrar el concierto en Barcelona mientras el Barça de Valverde sumaba una victoria más, esta vez en Champions. Jagger explicaba que se había comido una ‘botifarra’ y se dirigía en catalán a un público entregado y aún habrá alguno que diga que los Rolling Stones cantan siempre los mismos temas, como los que ahora, tras un 0-1 en un partido difícil, le preguntan a Valverde si se aburre con el juego del Barça. A mí los Stones me vuelven loca como a Ernesto Valverde seguir sumando victorias.
Llegó Valverde al vestuario azulgrana con la cámara incorporada en sus pizpiretos ojos y sin dejar de dispar clicks silenciosos. Necesitaba captar la esencia del que sería su espacio vital. En su fotografía salían movidos los elementos que distorsionaban el ambiente, por ejemplo Arda Turan ,no quería utilizar Photoshop el entrenador, él es un purista, necesitaba que nada molestase en su foto.
En el centro de la fotografía, un Leo Messi observador, discreto, feliz. Valverde captó su esencia y cuando reveló la primera fotografía vio que Messi no estaba solo en el centro, que Leo se había pegado a Luis Suárez, a Piqué ,a Busquets ,a Pepe Costa, el encargado en el club blaugrana de mimarle. Leo no necesitaba salir en el centro de una foto mostrando su colección de slips como Cristiano Ronaldo tras acabar su sequía goleadora, Messi le dijo en esa fotografía al técnico que él prefería un ‘txoko’ donde los amigos se reúnen para pasárselo bien respetándose los unos a los otros.
En esa foto que hizo Valverde cuando llegó, Neymar ya tenía cara de ‘todo por la pasta’, pero ‘Txingurri’ ni se inmutó. Provocó la marcha de Neymar una crisis azuzada por el entorno más obsesionado con controlar el club blaugrana si podía ser antes del 1 de octubre. Pero se demostró que era un montaje, no una foto, que la crisis no existía, que sencillamente Neymar y su padre habían mentido como bellacos y el único pecado del presidente fue confiar en sus empleados de alta cualificación. Por cierto, ahora que ha pasado todo y recuperando los negativos, veo a Robert Fernández realizando perfectamente su trabajo al lado de Urbano y los que salen como con cara de no ser tan buenos, negociando sin saber negociar.
Valverde realiza su trabajo con humildad, discreción, hablando a la cara, siendo justo y demostrando cada día que sabe de lo que habla.
`Sympathy For The Devil’ para arrancar y Keith Richards demostrando que no sólo Mick es inmortal. Y cuando suena ‘Jumpin’ Jack Flash’ sabes que está cerca lo mejor del concierto. Como con el Barça de Valverde. que sigue sumando para cuando llegue el ‘Satisfaction’ final