Los aciertos de Robert
Deberíamos preguntarnos si hemos sido injustos con el secretario técnico del Barça, Robert Fernández, que asumió el cargo en verano de 2015 tras las elecciones ganadas por Bartomeu. No podemos, por tanto, atribuirle las pifias de Arda Turan y Aleix Vidal que fueron obra de Luis Enrique. Todos los fichajes que ha hecho en los dos años que lleva han sido discutidos, a excepción de Umtiti, cuyo rendimiento inmediato lo convirtió enseguida en un acierto total.
Además del francés, en su primer verano fichó a Denis Suárez, Digne, André Gomes, Cillessen y Paco Alcácer. Aunque solo Umtiti es titular indiscutible hay que ser justos y admitir que el portero suplente tiene un buen nivel. Igual que Alcácer, a quien se le fichó para ser suplente de Luis Suárez y lleva nueve goles en sus últimos nueve partidos como titular, un promedio goleador que bien podría firmar el añorado Larsson. Digne es un digno sustituto de Alba. Denis Suárez está creciendo lentamente porque no es fácil quitarle el sitio a Iniesta oa Rakitic pero cuando juega cumple. Y André Gomes no acaba de convencernos pero la temporada pasada fue el décimo tercer jugador más utilizado por Luis Enrique y este año parece ir ganándose, poco a poco, la confianza de Valverde, que le ha puesto de titular en el Wanda y en San Mamés. Y durante el verano pasado fichó a Semedo, Paulinho, Deulofeu y Dembélé. El lateral portugués está exhibiendo velocidad y rigor defensivo. El brasileño ha cerrado bocas con su buena adaptación y presencia en el equipo. Es el tercer máximo goleador. La vuelta de Deulofeu también fue correcta si atendemos a su precio. Y, lamentablemente, la incorporación de Dembélé no puede evaluarse todavía. Al final pudiera ser que el buen rendimiento de los fichajes tapase su verano aciago.
El mayor acierto que hay que apuntarle a Robert ha sido escoger a Valverde como entrenador cuando cierta prensa pedía Oscar García o Koeman , la afición apostaba por Eusebio y Unzué se postulaba. Donde claramente ha suspendido es en el capítulo de ventas. No ha sabido ‘colocar’ a los descartados y dejó gratis a Sandro. La única buena venta fue la de Claudio Bravo