Se lleva la pana

EL VALENCIA DESMINTIÓ EN CORNELLÀ que es un equipo limitado a 12 o 14 jugadores. Marcelino dejó en el banquillo a Zaza, Guedes y Carlos Soler, un trío que intimida, y Kondogbia y Santi Mina pusieron los goles de un conjunto que suma ocho triunfos seguidos y aguanta el espectacular tirón del Barça. Tiene mérito lo del técnico asturiano: sabe lo que quiere y cómo buscarlo, no mira más allá del siguiente partido y tiene la suficiente cautela de no ensimismarse con los halagos. Si el Real Madrid y el Atlético, más el Madrid por presupuesto y plantilla, no aprietan por esta Liga como se vio en el derbi, ahí estará el conjunto levantino sin levantar la voz. El domingo, el líder acude a Mestalla en un duelo de traca sin

Piqué y con Vermaelen en el foco. El Barça ha puesto de moda otra vez la pana, que sirve para cualquier trabajo y te arregla un día. El de Valverde es un equipo sufrido y resultón. La imagen de

Messi revolcado por el suelo lanzando la puntita para que Paulinho hiciera el tercero en Leganés lo resume muy bien.

EL MADRID ESTÁ A UN PASO de explotar con los arbitrajes. Del vestuario a la sala noble del Bernabéu se pasa lista a penaltis y expulsiones que Borbalán ignoró en el Wanda. La matraca arbitral no es nueva. Florentino ya agitó el fantasma a principios de temporada, pero el sonrojante rendimiento de Bale (2 goles), Benzema (1) y CR7 (1), en su peor racha desde que llegó hace ocho años, exige callarse. La decepción no se disimula con campañas. Zidane ya no hace cambios milagrosos, solo tira de Asensio ,y Morata volvió marcar en el Chelsea. ZZ se puso el sombrero de bombero iniciando la ‘operación remontada’ sin tener muchos entusiastas a su alrededor y, naturalmente, sin atender a la baja forma de Kroos, Modric, Benzema y CR7, que recibirá un mustio Balón de Oro un día de esos. Al menos Simeone tiene la excusa de que la sanción FIFA le privó de hacer el equipo que quería. Pero las carencias están. El club reza para que sea enero y contar con Diego Costa y Vitolo