A la caza del culé
Extraña manera de felicitar en Cristiano en el programa de Manolo Lama en Gol
El viernes, en El Golazo de Gol, tuvieron una peculiar manera de darle la enhorabuena a Cristiano Ronaldo por su quinto Balón de Oro: homenajeando a Leo Messi y recordando que, a pesar del empate con los balones de oro, el argentino sigue siendo mucho mejor que él.
Debatían si era justo o no que empataran teniendo en cuenta los méritos futbolísticos de cada uno. A pesar de que la mayoría de sus colaboradores del día sostenían que era justo, tanto los espectadores que votaban como los vídeos del programa defendían lo contrario.
El primer video recordaba que a pesar del empate no se recordaba a CR7 marcando un gol como el del Getafe e insistía que “es increíble que empate a balones de oro con un tipo que es capaz de bailar alrededor de rivales como si no le costara nada”. Después de varios méritos más sobre Messi ofrecieron otro vídeo era aún más demoledor. Advertían a Cristiano: “No eres el jugador mejor pagado del planeta. Puedes ser el más buscado de Google, pero no has sido portada de Time. No han sacado brillo a tus botas. No has hecho flipar a Pep .No has generado la mayor locura generada en una ciudad por la llegada de un jugador de fútbol. No has colapsado las redes sociales ni has estado presente en todos los informativos”. Y añadían un “Así que shhhhht” advirtiendo al portugués que se callara. Y seguían: “No eres un creador. No eres el ejemplo que ponen a los niños que quieren jugar a fútbol. No eres el más generoso, por lo que no tienes más títulos de equipo”. Y comparaban el palmarés de uno y otro jugador y le recordaban los récords individuales de Messi. Y volvían: “Así que shhhht” haciéndole callar de nuevo. Al final, sentenciaban: “Enhorabuena Cristiano: has ganado tu quinto balón de Oro pero si crees que eres como Leo Messi, shhhhh”. Demoledor.
La estrategia de esta pasión desenfrenada, esta oda televisiva a Messi, en un día tan relevante para Cristiano, es difícil de explicar: quizás intentan captar al espectador culé, desahuciado de otros programas deportivos, como último recurso para intentar levantar unas cifras de audiencia estancadas y poco ilusionantes