VITAMINAS PARA MADRID
Pese a la soberbia actuación del meta Rubén y la maldición de los palos, el Barça goleó y llegará al Bernabéu con colchón Messi no marcó, estrelló tres balones en la madera y falló un penalti, pero Luis Suárez jugó su partido más completo
El Barça logró su objetivo de llegar al Clásico con once puntos más que el Madrid. Y, además de llevarse el botín de los puntos, se dio un atracón de autoestima con una actuación notable en la que lució sobre el tapete del Camp Nou todas sus virtudes: solidez defensiva y solidaridad en la presión, posesión de balón muy alta, movilidad posicional, instinto vertical en la recuperación y mucha clase. Esta vez, además, se encontró con que su ‘nueve’, Suárez, jugó su partido más completo de la temporada. Entre el meta del Depor y la maldición de Messi, con incluso un penalti fallado, la goleada no fue superior a ese 4-0 final, con dos goles de Paulinho, los dos de rebote tras sendos tiros al palo, y dos del uruguayo.
Leo fue, junto con Iniesta, clave pese a esa mala suerte con los postes que le persigue. Los dos magos azulgrana fueron los encargados de desmontar el tinglado de un Depor tierno atrás pero apañado en la zona de creación. E l Barça se encontró cinco veces con los palos, aunque dos de ellas acabaron en gol. Y también topó con otro gol fantasma. Esta vez fue un remate de Suárez el que entró por muy poco.
La mala noticia fue la lesión de Paco Alcácer, elegido una vez más para formar tridente con Messi y Suárez. Hasta que se retiró, a los veinte minutos, había entrado mucho en juego e incluso había efectuado un pase a Messi que había merecido acabar en gol. Rakitic fue medio centro para reservar a Busquets e Iniesta comenzó como interior diestro, con Paulinho por la izquierda. Mediado el primer tiempo, Valverde rectificó esas posiciones, con notable mejoría.
Aunque los azulgrana tuvieron el control desde el primer momento y, de hecho, en seis minutos Messi ya había rematado alto y Luis Suárez había marcado un gol correctamente anulado sin que el Depor prácticamente tocase el balón, faltaba profundidad. El conjunto gallego se aplicó con un 4-4-2 que buscaba superioridad en la media.
Cuando un Iniesta inspirado y un Messi eléctrico pusieron la directa, esa resistencia se vino abajo. En menos de dos minutos Rubén salvó tres veces al Depor. La primera, tras uno de los clásicos slaloms de Leo con remate final y paradón. A continuación, otro, tras remate en muy buena situación de Aleix FOTO: PERE PUNTÍ Vidal, sustituto de Alcácer. Y, también a continuación, nuevo chut de Messi con otro rechace providencial. Por fin, en pleno asedio, Iniesta se sacó de la chistera un pase por alto a Messi, en el interior del área y en buena posición. El argentino paró con el pecho y asistió a Suárez para el 1-0.
Catálogo de palos
A partir de ahí entraron en juego los palos. Poco después de un trallazo de Messi al larguero, un nuevo tiro al poste de Leo tras contragolpe azulgrana acabó en remate a gol de Paulinho, el 2-0. El gol fantasma de la noche llegó en una parada felina a remate de rabona de Suárez. Por muy poco, pero era dentro de la portería.
El tercer gol azulgrana es una obra maestra colectiva, recién iniciado el segundo tiempo. Con el Depor intentando presionar arriba, entre Iniesta y Messi comenzaron a superar líneas de presión desde la defensa, con detalles técnicos a los que se sumó Paulinho. El Barça fue ganando metros a base de pases al primer toque, lo que sucede cuando se juntan Andrés y Leo, hasta que Aleix lanzó una apertura para la subida de Sergi Roberto, que centró al segundo palo, donde Suárez remató con toda la ortodoxia de los delanteros centro.
El tercer tiro al poste de Messi fue de falta directa, poco después de que Mateu Lahoz escamotease ahora un penalti por patada de Schär a Suárez. No se atrevió en la zancadilla de Fede Valverde, también a Luis Suárez. Messi, en una noche de mala suerte total, se encontró con otro paradón de Rubén.
Cuarto poste: esta vez tras asistencia de Suárez a Jordi Alba, cuyo remate pegó en el poste derecho. Paulinho, como en el 2-0, recogió el rebote y anotó el 4-0. Y el quinto palo llegó en un remate de Suárez. A ver si el Barça ha agotado ya la mala suerte