CR7 imita a Messi

MESSI Y CRISTIANO SE CONTROLAN sus movimientos. Nada es casual entre ellos. Si Messi mostró su camiseta extendida a la grada del Bernabéu el 23 de abril tras marcar el gol 500 y el 2-3 del triunfo en el minuto ‘noventayramos', Crsitiano debió esperar cuatro meses hasta el 14 de agosto para repetir el mismo ritual y enseñar la zamarra al Camp Nou tras marcar el 1-2 en la Supercopa de un gran trallazo. Los dos astros rivalizan en ser designados como el mejor futbolista del mundo. CR7 acude a todos los retos que le cita Messi. No paró hasta igualar a cinco el Balón de Oro del argentino y ahora el luso es el estandarte blanco blandiendo los cinco títulos de 2017. Messi se reinventa cada año para seguir en el podio y dar gusto a los más sibaritas; hace jugar, asiste, marca y decide solo. Pero solo un animal tan portentoso, ambicioso, superdotado y con tanta autoestima como el luso podría mantener vigente el duelo de reyes de la era actual.

EL CLÁSICO ES DE MESSI Y EN EL Bernabéu ha jugado partidos memorables. Es el máximo goleador con 24 goles en 36 partidos, pero en Chamartín lleva marcados 14 en 18 duelos. Detrás vienen Di Stéfano (18) y CR7 (17). Messi llega al desafío en un estado de ánimo óptimo tras renovar y recibir la Bota de Oro y el Pichichi y ‘picado' por los tres postes al Depor. El crack blanco es capaz de ocultar su tensión con el club y dar su mejor versión.

EL MADRID DEPENDE DE CR7 para ganar finales (el gol del Mundialito es suyo) y para remontar en la Liga y Florentino sabe que no encontrará hoy a un jugador de su nivel (32 años) que litige con Leo. Salvo Neymar. El Bernabéu espera congraciarse con su crack y cerrar el año por todo lo alto; el Barça, con 24 invictos y sin presión, puede asestar un golpe definitivo a su eterno rival