El infierno de Stamford Bridge (2)
Los mejores momentos en un escenario incómodo: la exhibición de Messi y el ‘Iniestazo’
La Caverna habla del robo de Ovrebo, pero olvida el atraco al Barça en la ida
El Barça siempre lo ha pasado mal en el campo del Chelsea, próximo rival en octavos de final de la Champions League. Sólo ha ganado una vez, en la temporada 2005-06, pero el empate del ‘Iniestazo’ tiene sabor innegable a victoria
El 22 de febrero el Barça regresaba a Stamford Bridge, donde una temporada antes había sido descaradamente atracado por Pierluigi Collina, con lo que se había quedado en octavos de final de la Champions. Un año después, esta vez en el partido de ida (ya que el Barça había hecho los deberes y había acabado primero en la fase de grupos), el conjunto de Rijkaard regresaba a Stamford Bridge, que iba a presenciar una de las primeras exhibiciones europeas de Leo Messi.
Mourinho había convertido el césped en un fangal (se bautizó el campo como ‘Stamford Beach’) para perjudicar el juego del Barça y puso a Asier del Horno sobre Leo. Mediado el primer tiempo, una patada escalofriante del vasco a la rodilla de Leo quedó sin castigo. Poco después, nueva entrada salvaje. Esta vez sí fue expulsado por Terje Hauge, noruego, con justicia, pese a lo cual Mourinho se inventó aquello de ‘teatro del bueno’. El Barça ganó 1-2, con gol de Eto’o, en el que hasta ahora es el único triunfo en el campo del Chelsea, y ganó el título.
Una temporada después ambos equipos coincidieron en la liguilla (derrota por 1-0) y, en la Champions
2008-09, en semifinales. Es la edición del ‘Iniestazo’ y el antibarcelonismo proclama que el árbitro Tom Henning Ovrebo, también noruego, robó al Chelsea. Falso. El auténtico robo se produjo en la ida, en el Camp Nou, cuando Wolfgang Stark se comió un penalti de Ashley Cole a Henry, pitó un fuera de juego inexistente a Eto’o, que se quedaba solo ante Cech, y perdonó la segunda amarilla a Ballack.
Así las cosas, se llegó a la vuelta con 0-0. A Ovrebo se le reclama una mano, clara, de Piqué en el área en el descuento; otra de Eto’o (no tan clara); y varias lipotimias de Drogba. Precisamente fue expulsado Abidal por una jugada en la que ni tocó a Anelka. Piscinazo. La Caverna o el Chelsea olvidan esta jugada y una mano de Ballack a los 4 minutos.
El Barça empató in extremis, con el Iniestazo, aquel partido, en un ambiente muy hostil. Y perdió 1-0 en su última visita, en ida de semifinales de la Champions 2011-12, con un Chelsea ultradefensivo que sacó rédito del gol de Drogba y con postes de Cesc y Alexis. La visita a Stamford Bridge del próximo febrero será igual de dura