Quieren otro central cuanto antes
El Barça ha rastreado el mercado en pos de un defensa experimentado pero Mina sigue siendo el mejor colocado
El FC Barcelona quiere que el central que sustituya a Javier Mascherano llegue al Camp Nou cuanto antes una vez se abra el mercado invernal el 1 de enero para facilitar su adaptación al equipo de Ernesto Valverde. Como ha ido informando Mundo Deportivo, el mejor situado sigue siendo Yerry
Mina, defensa internacional colombiano del Palmeiras, por quien el Barça tiene una opción de compra para el verano de 2018 valorada en nueve millones de euros.
Avanzar los plazos con Mina para este mercado invernal significará muy probablemente que habría que pagar algo más.
Desde el Camp Nou se entiende que el ‘extra’ de inversión no puede ir más allá de los tres millones, así que el coste total del traspaso entre Palmeiras y el Barça en próximas fechas rondaría los 12 millones de euros a los sumo.
Los esfuerzos por dar con un central experimentado, redoblados a raíz del anuncio de Mascherano de cambiar la Liga española por la china, no están dando sus frutos. Con Mascherano se pactó internamente que aguantara en la plantilla azulgrana hasta que Samuel Umtiti, actual mente lesionado, estuviera disponible, situación médica que alcanzará si todo van bien a finales de enero. El Barça ha estado rastreando el mercado europeo en busca de un central experimentado que pudiera resultar barato pero de momento no ha encontrado nada con la calidad que exige jugar con garantías en el Camp Nou, por lo que Mina aparece como la opción más consistente para reforzar la zaga también a corto plazo.
La idea es que, de cara a la segun da parte de la temporada, el central que venga tenga el rodaje oportuno para aclimatarse al estilo de juego del equipo. En el caso de Mina, que llegaría directamente del fútbol sudamericano al europeo, ese planteamiento tiene aun más sentido, porque si bien es un defensa que es titular en la selección cafetera y una referencia en el fútbol de clubs del cono sur, ya se sabe que el salto al viejo continente suele requerir una fase de adaptación más larga. Llegar a principios de enero permitirá al nuevo fichaje aprovechar un calendario que depara partidos de Copa del Rey y jornadas de Liga teóricamente asequibles, con partidos ligueros en el Camp Nou ante Levante y Alavés, propicias para rodarse y adquirir los automatismos que implica jugar en el Barça