EMPIEZA A RUGIR
Fernando Alonso se estrena en los ‘Roar (rugido) Before Rolex’, los test previos a las 24 horas de Daytona El ovetense disputará hoy sus primeras dos sesiones de entrenamientos libres con el Ligier JS P217
Un nuevo año siempre va acompañado de propósitos, y el de Fernando no es otro que el de volver a ganar, no sólo en la F1, sino en otras competiciones que le permitan entrar en la historia del automovilismo mundial. Eso es lo que precisamente buscará a partir de hoy. El quinto día de 2018 será muy ajetreado para el ovetense, que se estrena en el asfalto del Daytona Super Speedway con su Ligier JS P217 para participar en la primera de las tres jornadas de los ‘Roar before the Rolex’, test oficial, también llamado ‘rugido’, previo a la histórica carrera que se disputará los próximos días 27 y 28 de enero en la ciudad del estado de Florida.
El ovetense ya pasó nochevieja en Daytona para aclimatarse lo antes posible al cambio de horario y lleva todo el invierno preparándose para triunfar en la carrera americana y en una temporada que se antoja apasionante. Antes de pensar en la F1 y en la posibilidad de correr Le Mans, el español se centra en poder conquistar su primer triunfo del año, algo que hace demasiado tiempo que no saborea. Para ello, serán claves las tres jornadas de test que disputará hoy, mañana y el domingo con su prototipo.
El bicampeón de F1 deberá aclimatarse rápidamente a un coche que ya probó el pasado mes de noviembre en un test realizado en Motorland Aragón, y tendrá que asimilar múltiples conceptos para ser competitivo y poder optar a la victoria.
Muchos deberes
Hoy se disputarán las primeras dos tandas de entrenamientos libres (17-18.15 h y 21.30-23.30h), un total de 3 horas y cuarto que el asturiano deberá compartir junto a sus dos jóvenes compañeros Lando Norris y Phil Hanson. Entre los tres pilotos y los ingenieros de su equipo, el United Autosports, deberán encontrar los reglajes adecuados a los dos tipos de trazados que conforman el circuito (óvalo e infield). A su vez, dicho ‘set up’ deberá tener un equilibrio perfecto entre los tres pilotos para buscar el beneficio global del equipo como conjunto en sus relevos.
En esta primera toma de contacto, Fernando podrá vivir por fin en su propia piel el tener que compartir pista con los pilotos de las diferentes categorías y practicar al detalle la metodología de doblaje, algo esencial para esta carrera. Poco a poco, con estas tres primeras jornadas, el de Oviedo espera conseguir un ritmo competitivo que le permita luchar con aquellos pilotos más experimentados, como ya logró en las 500 Millas de Indianápolis.
El ovetense, que a partir de hoy lucirá un casco especial para la cita norteamericana de color blanco, quiere seguir entrando en el corazón de los americanos, una afición que ya le demostró una gran devoción en la Indy500 al reconocer el valor del español para batallar contra grandes especialistas en un terreno que no es el suyo. Y es que como dijo hace unos días Fernando, “salir de mi zona de confort participando en una carrera tan icónica como las 24 Horas de Daytona es increíble”.
“En los últimos meses he estado pasando viendo varias carreras de las 24 Horas de Daytona y eso me hace tener incluso más ganas de probarme a mí mismo. ¡Sin duda será algo muy divertido!”, exclamó Alonso, que afronta la prueba con la ilusión de un niño. A sus 35 años, empieza una nueva aventura americana para el de McLaren después de la desilusión final que se llevó en Indianápolis tras romper su motor cuando tenía opciones de ganar. Alonso ha pasado los últimos tres años como un león enjaulado dentro de un coche que le impedía correr hacia el triunfo. Ahora, quiere volver a rugir, y hoy tiene la oportunidad de empezar a hacerlo