EN LA PICOTA
La versión B del Real Madrid vuelve a frustrar las expectativas en Soria y sigue alimentando las dudas El rendimiento de la segunda línea madridista no permite a ZZ hacer más rotaciones que las obligadas
El Real Madrid sentenció su clasificación para los cuartos de la Copa del Rey en Soria, ante el Numancia, gracias al 0-3 final. Sin embargo, el desenlace de este partido de ida de octavos ha generado muchas dudas en el entorno del club, que ve cómo la versión B de su plantilla está muy lejos de ofrecer el rendimiento esperado.
Desde la misma noche del jueves se escucharon voces críticas con las prestaciones de jugadores como Theo o Marcos Llorente, para los que se reclamaron nuevas cesiones. Y ayer, titulares como “Un engaño al marcador” u “Otro plantón del plan B”, del diario AS, reflejaban el sentir general del madridismo, pese al 0-3.
El rendimiento de las piezas claves de la denominada ‘segunda unidad’ (Dani Ceballos, Vallejo, Borja Mayoral, Theo o Marcos Llorente, todos ellos titulares en Los Pajaritos) está muy lejos del imaginado a principios de curso.
Por motivos diversos, ninguno de ellos ha alcanzado el rendimiento esperado, lo que les está costando duras críticas y mermando las posibilidades de Zinedine Zidane de introducir rotaciones en el equipo titular, más allá de las obligadas por circunstancias como lesiones o sanciones.
Cuatro de estos cinco jugadores ocupan los puestos del 20 al 23 en la relación de los minutos disputados por los 28 futbolistas alineados hasta el momento por Zidane: Ceballos es el 20º con 532 minutos; Marcos Llorente es el 21º (530), los mismos que Borja Mayoral (22º) y Vallejo, con 449 minutos, es el 23º. Por debajo sólo están Tejero, Rodríguez, Franchu, Quezada y Valenciano. Theo es el único que está por encima del puesto 20; concretamente, ocupa el 18º lugar del ranking, con 712 minutos.
Un rendimiento muy lejos del esperado que no logran maquillar ni en ocasiones a priori propicias como el partido ante el Numancia, un equipo de inferior categoría al que el Real Madrid doblegó gracias a dos penas máximas y con dos goles en los últimos tres minutos cuando su rival jugaba en inferioridad numérica desde el minuto 60 por la expulsión de Diamanka