Sergi Roberto es un diamante
Philippe Coutinho y Sergi Roberto son compañeros de equipo en el Barça de Ernesto Valverde y Leo Messi desde esta semana. Son dos futbolistas que representan dos ideas del fútbol que se complementan en los últimos años. Philippe es una estrella mediática que ha crecido pasando por el Vasco de Gama, el Inter de Milán, el Espanyol y el Liverpool hasta llegar al Camp Nou. Sergi es jugador de un solo club desde que llegó a La Masia en 2006 para incorporarse a la plantilla del Cadete B del Barça. Curiosamente, los dos nacieron en 1992, el año olímpico barcelonés. Tienen una edad perfecta para su oficio: 25 años. Y son un ejemplo de dos maneras de llegar al primer equipo de un club. Roberto desde la cantera, con un coste económico cero, mientras Coutinho aterriza en el Camp Nou como el fichaje más caro de la historia del Barça en un mercado desorbitado en lo que se refiere a millones de euros; ha costado 160.
El valor de Sergi Roberto dentro del fútbol moderno es extraordinario. Tiene la calidad técnica que se enseña en la Ciutat Esportiva Joan Gamper, la fuerza unida a la velocidad con la que se juega hoy en día, y todo eso dentro de la que ya es la escuela, la filosofía, la idea de entender este deporte desde la órbita blaugrana. Sergi puede ocupar la posición de lateral, de pivote, de interior y hasta de extremo. Podríamos afirmar con un poco de exageración que, menos de portero, su rendimiento es de sobresaliente en cualquier lugar que lo pongan. Sergi Roberto es un diamante.
Sergi, que es de Reus, empezó a jugar en su barrio en la U. E. Santes Creus y, antes de venir a Barcelona, estuvo en el Nàstic de Tarragona. Actualmente está recibiendo muchos elogios. Sus dos últimos partidos de Liga contra el Real Madrid en el Santiago Bernabéu (0-3) antes de Navidad y contra el Levante en el Camp Nou (3-0) en el estreno de 2018 han sido fantásticos. Defiende, ataca y asiste. Es un auténtico 3-EN-UNO, ese aceite multiusos que lubrica, limpia y afloja. Sus pases de gol son maravillosos. Su poder le permite muchas veces cruzar todo el campo y centrar balones que aprovecha especialmente Luis Suárez. Con el delantero uruguayo forman un tándem perfecto.
Los Coutinho son necesarios en los grandes equipos. Son los cracks. Pero los Sergi Roberto son imprescindibles en un deporte de equipo. Son las columnas que aguantan todo el edificio. Son los peones de lujo que acaban haciendo que el rey Leo se corone campeón. Por eso es igual de clave fichar a los mejores como cuidar y potenciar a los jóvenes de La Masia para que acaben irrumpiendo en el once titular azulgrana como lo ha hecho Sergi. Un diamante de apellido Roberto
El valor del blaugrana dentro del fútbol moderno es extraordinario: defiende, ataca y asiste