Sergi Roberto ejemplo y objetivo
No habrán sido renovaciones tan mediáticas como las últimas de futbolistas más desequilibrantes como Leo Messi, Andrés Iniesta y Luis Suárez, pero el doble acuerdo de las últimas 48 horas con Gerard Piqué y Sergi Roberto hasta el año 2022 será una de las mejores noticias del año en el Camp Nou. El central es el mejor central del mundo y, pese a que Umtiti ya se ha consolidado en la elite, se le echará mucho de menos cuando se retire. Y el lateral, en silencio, se acabará erigiendo en una pieza clave y un ídolo del Camp Nou.
Para La Masia, formadores y canteranos, Sergi Roberto es a la vez un ejemplo y un objetivo. Es un ejemplo, desde hace años, de comportamiento dentro y fuera del campo; de compañerismo y buen rollo en el vestuario; de educación y amabilidad con todos, sin distinción, entrenadores, directivos, empleados, periodistas, padres y los aficionados más cercanos de la Ciutat Esportiva y el Mini; de trabajo en los entrenamientos y de cuidarse en el día a día; de paciencia para esperar su momento y aprovecharlo como lo está haciendo ahora; y, sobre todo, de mantener los pies en el suelo y ser el mismo chico humilde y cercano que aterrizó en la antigua Masia procedente de su Reus natal hace ya más de una década.
Sergi Roberto es también un objetivo. O debería ser el objetivo de los técnicos del Barça, del primer equipo y la cantera. No se le puede pedir a La Masia que produzca otro Messi, porque no habrá otro igual; ni ‘Xavis’, ‘Iniestas’ o ‘Busquets’, porque el listón está altísimo. Ni posiblemente ‘Piqués’. Pero sí hay que exigir que aparezcan muchos más ‘Sergi Robertos’. Jugadores de un físico apto para el profesionalismo, de una técnica depurada, fina, pero sobre todo de un nivel táctico excelente, que entiendan el fútbol del Barça, complicado para los que llegan de otros clubs; sepan qué hacer con y sin balón en cada instante del partido; y combinen a la perfección y lean correctamente las intenciones y los movimientos de los Messi, Suárez y cía. de la época. Talento e inteligencia. Las dos principales cualidades de Sergi Roberto. En el terreno de juego, porque lejos del césped son infinitas
Los niños deben fijarse en él; los técnicos, formar jugadores como él