Un salvavidas azulgrana
La Fundació presentó un documental sobre sus programas en todo el mundo
La Fundació del FC Barcelona presentó ayer, en el Teatre Romea, el documental ‘Un Joc Anomenat Esperança’, una visión de lo que supone el programa FutbolNet en zonas desfavorecidas a través de los ojos de cinco periodistas de prestigio: John Carlin, Laura Restrepo, Martín Caparrós, Juan Cruz y Santiago Roncagliolo, que comparten las historias de cinco niños y niñas de Senegal, Bangladesh, Brasil, Grecia y Barcelona. El acto, presentado por Pere Escobar, contó con la presencia de Josep Maria Bartomeu, presidente del Barça, y Jordi Cardoner, vicepresidente primero, además de los directivos Dídac Lee, Pau Vilanova, Jordi Calsamiglia, Maria Teixidor y Enrique Tombas. También asistieron los ex jugadores José Edmílson y Albert Ferrer; el entrenador del primer equipo de balonmano, Xavi Pascual; Maria Vallès, directora de la Fundació; y Joan Camps, de Penyes, entre otros.
Bartomeu explicó que “trabajamos en contextos y países muy diferentes y complicados. Queremos hacer visible nuestro trabajo social, no sólo por transparencia o reconocimiento, sino porque creemos que podemos ser un buen ejemplo”. Cardoner, que participó en una charla con los periodistas, explicó que “la metodología FutbolNet se ha implementado con éxito en 53 países, con más de 140.000 participantes y 600 educadores y educadoras”.
En la charla, Caparrós, que se declaró socio de Boca Juniors y presentó la historia de Senegal, destacó FutbolNet como “factor de integración de hombres y mujeres”; Roncagliolo, protagonista en Rio de Janeiro, explicó que “en la favela, de repente, ves un centro deportivo en el que juegan los hijos de los narcos y que es un remanso en medio de la violencia exterior”; y Carlin, que vivió la experiencia de una niña en Bangladesh, destacó que “el fútbol es la religión universal, el transmisor de esperanza”; Nicolás Castellano, que colaboró en Bangladesh, se quedó con que “la Fundació Barça ayuda a 7.500 niños”. El documental ha sido dirigido por Jorge Martínez