SIN RIVAL AL SPRINT
El joven colombiano Álvaro Hodeg (Quick-Step) sorprendió y logró un cómodo triunfo en la primera etapa La jornada se desarrolló según el plan previsto y los gallos del pelotón se limitaron a cumplir el expediente
Hay veces que los sueños se hacen realidad y ayer el del joven colombiano del Quick-Step Álvaro José Hodeg se cumplió. El ciclista de Montería venía de lograr hace tres días su primer triunfo en Europa en la clásica belga de Handzame y ayer logró su primera victoria World Tour, después de beneficiarse del fenomenal trabajo de su equipo. Éste le sirvió la victoria en bandeja para que fuera el primer hombre de la Volta que levantara los brazos en señal de victoria, por delante de los integrantes del Bora Sam Bennet y Jay Mccarthy, con Alejandro Valverde entrando en octava posición para evitar cualquier susto.
La primera etapa de la Volta, de 152 kilómetros, con inicio y final en Calella, tenía escrito un desenlace al sprint y éste sólo podía alterarse si algún valiente atacaba en el Port de Collsacreu, de 3ª categoría, situado a 12 km de meta, y con rampas que oscilaban entre el 4,7% y el 6%; una empresa harto complicada para la que nadie compró una entrada.
Control de Movistar
Precisamente, en la aproximación a esta cota, a 20 km de meta, el pelotón, siempre comandado por Movistar, Bora y Cofidis, tiró por tierra la escapada de los seis valientes que casi arrancaron de inicio, con tres españoles entre ellos y con el integrante del Burgos-BH Jesús Ezquerra resistiéndose hasta la extenuación a ser engullido y dotando a sus patrocinadores de unos instantes de gloria en la Volta con m ayor difusión de la historia, ya que tiene un alcance televisivo en 190 países.
En las primeras rampas del Port de Collsacreu saltó un Manzana Postobón, Wilmar Paredes, cuyo ataque para nada inquietó a los pesos pesados, que le dejaron hacer, más preocupados de tomar unas buenas posiciones para el descenso.
En este punto Movistar, con un enorme Imanol Erviti luchando contra el viento al frente del pelotón, ya dio un paso al frente y a 60 km/h tomó el control de una carrera que se presentó en Calella en un abrir y cerrar de ojos. A medida que ésta acercaba a Calella la formación telefónica levantó el pie de la cala y los equipos de los sprinters tomaron posiciones de privilegio, sobre todo Cofidis, Bora y Quick-Step. Pero fue este último el que mayor ventaja sacó de los toboganes finales que dibuja la carretera en la localidad del Maresme, que desde hace siete años acoge de forma seguida la primera etapa de la ronda catalana.
La locomotora del Quick-Step
En la recta final Bon Jungels se puso el mono de trabajo y se dejó la piel en beneficio de su compañero Hodeg, que sólo tuvo que rematar al fondo de las redes el gran centro templado que le sirvió. Bennet (Bora) disfrutó desde el espectáculo desde atrás, y Bouhanni (Cofidis) se vio encerrado y no pudo disputar el sprint que dominó con una solvencia insultante el joven Hodeg, que iba para futbolista pero a quien una lesión en la rodilla apartó del fútbol. Hoy, en su país, Colombia, ya le comparan con Fernando Gaviria.
“Ha sido increíble. Es un sueño hecho realidad, el equipo ha hecho un trabajo increíble. Tenemos un equipo muy fuerte”, dijo antes de subir al podio y dedicar la victoria a su equipo, a su familia y a Dios, en la víspera de la segunda etapa de hoy, de 175 km, entre Mataró y Valls, con un perfil similar al del primer asalto de la Volta
1 FÁCIL VICTORIA Hodeg se aprovechó del buen trabajo de su equipo y no encontró oposición al final
2 DÍA TRANQUILO Los favoritos buscaron acabar la etapa sin sobresaltos