SABOR CAFETERO
Jarlinson Pantano hizo buena la escapada y se impuso en Vielha tras 219 kilómetros rapidísimos Egan Bernal recortó tres segundos a Alejandro Valverde y ahora está a 16” a falta de dos etapas
Nueva exhibición ayer del auge del ciclismo colombiano en la Volta Ciclista a Catalunya con la victoria de Jarlinson Pantano (Trek) en las calles de Vielha. En la etapa maratón, la más larga en esta edición de la ronda catalana, de 212 kilómetros, el pelotón voló y sorprendió a todo el mundo llegando a la línea de meta con media hora de antelación, producto del fuerte ritmo con el que rodó –sólo en la primera hora de carrera se recorrieron 52 kilómetros– fruto de la sólida escapada compuesta por doce unidades que se formó en el kilómetro 25, justo antes de la subida al Port del Cantó, de categoría especial, y de la que formaron parte 12 unidades.
De todos ellas, sólo dos aguantaron el fuerte ritmo que se necesitaba para aspirar a la victoria: Jarlinson Pantano (Trek-Segafredo) y el noruego Vegard Stake Laengen (UAE). Ambos lograron llegar a la entrada del túnel de Vielha con 36” de margen sobre un pelotón que iba muy estirado y del que para sorpresa de todos un día más saltó Alejandro Valverde, el líder. Tras la oscuridad de los cinco kilómetros de longitud del túnel, Pantano y Laengen salieron como motos, pero sólo con 16” de ventaja. Les venían pisando los talones y en una bajada vertiginosa, más delicada de lo que parecía pese al ancho de la vía, el ciclista colombiano del Trek se plantó con unos metros de ventaja en Vielha que hizo buenos en cuando vio la oportunidad. Aprovechando el último km revirado, dio un golpe de riñones y dejó resignado a su compañero de fatiga, yéndose a la caza de una victoria que necesitaba después de que desde que defiende los colores de este equipo, hace dos años, sólo les pudiera haber dado el campeonato nacional de su país.
Celebró una victoria que no fue
De hecho, este es el primer triunfo del ex compañero de Contador desde que lograda el triunfo en la 15ª etapa del Tour de Francia de 2016, y ya han pasado casi dos años. Era el segundo triunfo colombiano en una Volta, de claro sabor cafetero, no ya por la presencia del Manzana-Postonón y de los 17 corredores de Colombia, sino por los mucho que están dando que hablar sus ciclistas tras su elevado rendimiento.
La imagen del día la protagonizó el esloveno Matej Mohoric. El de Bahrain-Merida, uno de los corredores más combativos, celebró su llegada al sprint en tercera posición como si hubiera ganado, con el puño cerrado al aire, en un día que difícilmente podrá olvidar. Y no era para menos, se trataba de su primera victoria World Tour en el caso de haberse producido.
Entre los favoritos hubo el correspondiente marcaje. Alejandro Valverde no quiso sorpresas y entró octavo, precedido por su fiel compañero en Movistar José Joaquín Rojas, atento a lo que sucedía; después que Egan Bernal (Sky) le recortara tres segundos en el sprint especial. Ahora la diferencia entre ambos es de 16” a falta de dos etapas, una distancia que debería valer, pero ya se sabe que en el ciclismo no se puede cantar victoria hasta el final, y menos en una carrera como la Volta, en la que las bonificaciones siempre han sido tan importantes