Woods se considera “un milagro andante”
El ex nº1, sorprendido: “Estoy teniendo una segunda oportunidad en la vida”
“Estoy teniendo una segunda oportunidad en la vida”. Tiger Woods dixit. Y no le falta razón al ex nº1 mundial, que disputará su primer Masters desde 2015, con 42 años ya a cuestas. En 2016 y 2017 faltó al estar lesionado en la espalda y sufrir varias operaciones. Tras un año de ausencia del circuito, el Tigre ha vuelto al PGA Tour en un estado de forma que ha ido progresando de semana en semana: 23º en el Farmers de San Diego, corte en el Open de Los Angeles, 12º en el Honda Classic, 2º con opciones de victoria en el Valspar y 5º en Bay Hill.
Juega esta semana en Augusta como nº 104 del mundo, cuando en su último Masters era el 101 del ranking. Será su 21ª presencia en Augusta, con un bagaje de 4 victorias (1997, 2001, 2002 y 2005), dos segundos puestos y un tercero entre sus 13 finales en el top 10. Jack Nicklaus (6), Arnold Palmer (4) y Tiger (4) son los únicos con 4 victorias o más en el Masters. La última victoria del californiano en el circuito (suma 79 en total, de ellas 14 en Grand Slams) data de 2013: Mundial Bridgestone en Ohio.
Tiger asistirá la tarde del martes a la Cena de Campeones cuyo menú elige el ganador del pasado año, Sergio García. El torneo le espera como uno de los favoritos. “Es algo hasta gracioso”, desvela el Tigre en una publicación en su web oficial. “Un gran cambio, porque hace medio año lo más probable era que ni siquiera pudiera jugar”, añade. Después de someterse a una cirugía de fusión espinal en su espalda el pasado mes de abril, la cuarta intervención quirúrgica desde marzo de 2015, y con su carrera profesional en peligro, Tiger comenzó una ardua tarea de rehabilitación sin tener muy claro hasta dónde le llevaría.
“He estado mejor cada semana que he competido. Un poco más fresco, como si estuviera empezando a jugar las piezas”, explica Tiger. El segundo jugador con más victorias en la historia del PGA Tour se sorprende a sí mismo por lo rápido y lejos que ha llegado. “Estoy teniendo una segunda oportunidad en la vida. Soy un milagro andante”, dice.
Tiger está ansioso por jugar la 82ª edición del Masters. Es su torneo favorito y lo echa mucho de menos. “Estoy ansioso por jugar. Es el torneo mejor organizado del mundo. El campo, los aficionados, la atmósfera… Es el paraíso de los golfistas”. La semana pasada Tiger jugó por primera vez el campo de Augusta desde su última ronda en el Masters de 2015, cuando finalizó 17º empatado. Lo hizo junto a su compatriota Bryson DeChambeau.
“Han cambiado algunos greenes, pero se ven como si llevaran allí 100 años. El campo está fantástico y mi libro de yardas es básicamente el mismo”, añade. Lo que sí tiene claro Woods tras perderse los dos últimos Masters por lesión es que sus expectativas no han cambiado: “Estoy aquí para ganar”