Ser o no ser para el Athletic en la visita a La Cerámica
Villarreal es uno de los últimos asideros para mantener las ilusiones bilbaínas
A poco más de un mes para que se ponga el lazo a la temporada, el estadio de La Cerámica (21.00 horas, GOL, Iglesias Villanueva) alberga una cita de esas incómodas, que a tenor de la estadísticas parece programada para el fracaso de los bilbaínos. Los leones se presentan en un feudo donde se retuercen los renglones.
Eso sí, los lunes se le dan bien al Athletic y no es que sea un argumento de peso, pero también es cierto que en algún momento los atisbos de mejoría mostrados por el conjunto bilbaíno -muy pocos- tienen que cuajar. Y si fuera con un triunfo, miel sobre hojuelas, que habría aún margen para seguir pensando
que se puede hacer algo de una cierta enjundia.
El caso es que este lunes debe servir, entre otras cosas, para certificar que los progresos mostrados ante el Celta deben continuar, y con el aderezo de un buen resultado. Sería una buena noticia que San José e Iturraspe tuvieran mando en plaza y dirigieran como la semana anterior.
Lo normal es que ambos compongan el centro del campo, con Susaeta y Córdoba en las bandas y Raúl García por detrás del delantero centro, papeleta que se la asignaría a Williams, ya que parece que Aduriz tiene encomendado otro papel. Rodeando a Kepa se situarían De Marcos, Núñez, Iñigo Martínez y Balenziaga.
Es decir, Ziganda podrá disponer de toda su plantilla a excepción de Yeray, que en breves fechas podrá volver. Rico también se suma al proyecto y no sería de extrañar que hoy dispusiera de un rato. Además, Muniain podrá volver después de más de seis meses desde su lesión.
En definitiva, la cita de hoy puede servir para acceder a una cierta cota de ilusión y evidenciar que esta temporada es de sofocos y padecimientos. Caer en Villarreal supondría diluir aún más las pocas esperanzas de una afición alicaída. Pensemos en lo mejor, en que hay Liga a través de un triunfo, porque de lo contrario...