Roberto Firmino Made in Europa
El Liverpool es, sin duda, uno de los equipos revelación de esta temporada en Europa. Contra pronóstico está a un paso de la final de Champions League y en una posición cómoda en Premier League. Mientras Mohamed Salah, en una temporada fuera de lo normal, se está llevando todos los elogios, el conjunto está cumpliendo su papel a la perfección y hay actores secundarios que son pilares del equipo.
Este es el caso de Roberto Firmino, que tiene casi tanta culpa como el egipcio que el Liverpool rinda a este nivel tan elevado. Jürgen Klopp ha dado con la tecla al apostar por el brasileño, clave en el entramado ofensivo ‘red’ por el papel que interpreta dentro del terreno de juego. El brasileño, con sangre sudamericana pero fútbol europeo, hace mejores a Salah y Firmino, despreocupados casi de la elaboración y fijados en finalizar las jugadas, con ello tantos goles.
Firmino llegó con solo 19 años a Alemania. No era para nada uno de los jóvenes talentos que se predicen en Brasil y su fichaje no fue de relumbrón. Tras media temporada, y al inicio de la siguiente, se convirtió rápidamente en miembro titular, aunque no siempre jugaba por dentro. Su fútbol, más vistoso que práctico, gustó en Hoffenheim, y en su cuarta temporada firmó nada menos que 22 goles, lo que llamó la atención de grandes clubs para que, un año después, recalara en el Liverpool.
Brendan Rodgers no supo exprimir a Firmino. Tuvo que ser Klopp, con su particular forma de atacar los espacios, el que moldeó al brasileño. Le hizo jugar más atrasado y de más de forma más práctica, rompiendo las defensas con sus enormes movimientos entre linea. Así, ha anotado nada menos que 26 goles esta campaña, su mejor registro, repartiendo otros 14 al resto de sus compañeros. Un jugador moldeado al estilo europeo pero que será clave para Brasil en el Mundial