Lo de Sergi Roberto, una brutalidad más
El pasado curso, el Peralada, modesto equipo de un pueblo pequeño, quedaba eliminado en el último suspiro para acceder a Segunda B. Pasaron unos días y el Gavà fue descendido por asuntos normativos, así que el Peralada ascendió de rebote. Por aquellas fechas, el Girona asciende a Primera División. Contactos y el Peralada se convierte en su nuevo filial. Empieza el campeonato y la cosa no marcha. Se toman algunas decisiones y ya salvados. Ayer lo celebraron con alborozo y cava. Ahora esperamos que el Barça B también consiga el éxito. Falta poco y puede ser La sorpresa desagradable de la semana ha sido el fallo del Comité de Competición sancionando con cuatro partidos a Sergi Roberto. Dura e inexplicable porque rápidamente te informan que otro futbolista, Damián Suárez, lateral diestro del Getafe, con la misma redacción de acta y misma descripción de la falta fue sancionado solamente con un partido. Hemos topado, una vez
más, con la decisión de este comité. Esta situación es histórica, repetida y normalmente perjudicial para el Barça. La rareza es que un comité de este estilo lo forme una sola persona, que se reunan normalmente en Madrid, que probablemente sea seguidor del Real Madrid. Aquí la federación, La Liga, los árbitros, los comités, los... todo está en la capital donde, además, reside y manda un club con un gran poder económico, político y social. Parece que ha llegado el momento de actuar y decir basta. En pocos días hay elecciones y quizás puede ser el momento adecuado para cambiar algunas cosas