Un doblete de Kane salva a Inglaterra
El absurdo penalti de Walker resucitó a Túnez
La nueva Inglaterra de Gareth Southgate estuvo a punto de sumarse a Argentina, Brasil y Alemania, que tropezaron en su debut en el Mundial, pero un gol en el descuento de Harry Kane le permitió ganar a Túnez (1-2) y enmendar un absurdo penalti de Kyle Walker. El flamante capitán de los ‘pross’ no había marcado en una fase final y su doblete tras sendos córners impidió a África sumar su primer punto en el torneo al caer antes Marruecos, Egipto y Nigeria.
Inglaterra salió lanzada y en la primera parte fue mucho mejor superando la presión de Túnez con un juego veloz y la movilidad de sus puntas. Southgate, admirador del estilo de Pep Guardiola, ha cambiado la fisonomía de los ‘pross’ dejando en el olvido sus desplazamientos largos de antaño para imponer el toque con criterio del balón.
Inglaterra marcó pronto después de que Mouez Hassen sacara con un pie un remate de Jesse Lingard y Raheem Sterling fallara un gol cantado. John Stones cabeceó un córner, Hassen palmeó el balón con un paradón, pero Harry Kane, en el rechace, anotó a placer (11’).
Hassen, lesionado en una acción anterior en el hombro izquierdo, se resintió en el gol y dejó su plaza entre lágrimas (15’) a Farouk Ben Mustapha, que no desentonó en absoluto. Pero un absurdo penalti de Kyle Walker por soltar el brazo en un salto con Fakhreddine Ben Youssef cambió el partido. Ferjani Sassi lo lanzó y Túnez se encontró con el empate en casi su primera llegada.
Un cabezazo picado al larguero de Dele Alli y un balón al poste de Lingard impidieron a Inglaterra ir con ventaja al descanso. A los ‘pross’ les faltó contundencia en el remate y en la segunda parte Túnez compactó su defensa y muy bien replegado desconectó al rival, cuya ilusionan- te primera parte dio paso a la impotencia de Kane, Sterling, Lingard y Alli para generar ocasiones hasta que, en el 91’, Maguire tocó de cabeza en un córner y Kane giró el cuello para poner el balón al palo corto. El crack salvó con su oportunismo a Inglaterra y, sobre todo, a Walker del escarnio por su penalti