‘Set’ de Inglaterra ante Panamá
Los ‘pross’ se jugarán el primer puesto con Bélgica
La selección inglesa atropelló sin miramientos a la enclenque Panamá para firmar la mayor goleada del Mundial (6-1). Lo hizo sin despeinarse, marcando los goles por inercia y casi sin querer. Todos ellos menos dos (el golazo de Lingard y el tercero de Kane) llegaron a balón parado.
El partido fue un martirio para los centroamericanos, desangrados sin remedio ante una Inglaterra que, sin desplegar su mejor versión, aprovechó los regalos para ganar confianza y sensaciones. Kane, con dos tantos de penalti y uno de rebote, alcanza los cinco goles y lidera en solitario la tabla de golea- dores superando a Cristiano y a Lukaku, ambos con cuatro.
Como contra Túnez, la estrategia fue el arma que acercó a Inglaterra a la victoria gracias al oportunismo de Stones, autor de un doblete. Mucho del mérito reside en el privilegiado pie derecho de Trippier, una mina de oro para el combinado inglés.
La primera parte despertó con el testarazo de Stones, que remató solo en el punto de penalti para dejar en la lona al país centroamericano, del que poco o nada se supo a partir de entonces. A medio gas transitó Inglaterra por un partido sin mucha historia hasta que una imprudencia de la zaga panameña terminó con el árbitro señalando un penalti sobre Lingard. Kane lo ejecutó con un disparo a la escuadra (22’).
Antes del descanso llegaría el festival de goles. En ocho minutos se anotaron tres: una obra de arte de Lingard desde fuera del área (36’), otro de Stones después de una jugada de estrategia de tiralíneas (39’) y otro de Kane de penalti (44’).
La segunda mitad, sin nada en juego, fue testigo del ‘hat trick’ de Kane tras un rebote afortunado y del histórico gol de Panamá, un consuelo para un país que hizo su primer gol en el Mundial en una falta lateral ya con el 6-0 brillando en el marcador. El héroe nacional tiene nombre y apellidos: Felipe Baloy.
Los ‘pross’ se jugarán la primera plaza del grupo G en la última jornada ante Bélgica en un duelo que promete emociones fuertes