Chupinazo de la Bélgica de Courtois
1- Los ‘diablos rojos’ echan al Brasil de Neymar (1-2) después de disfrutar de un partidazo auténtico 2- Auto-gol de la canarinha y un penalti no señalado
Chupinazo de Bélgica. Vestida de roja, no necesitó el pañuelo de los San Fermines, llevaba la fiesta pegada al escudo. Se creyó la selección belga que podía ganarle a toda una pentacampeona y lo hizo a lo grande, con un partidazo de las dos selecciones más divertidas del Mundial. Ha eliminado Bélgica a Brasil, la gran candidata a ganar este Mundial, enviando a casa a Neymar y Coutinho, a Gabriel Jesús y Willian. Ha expulsado a una selección brasileña que echó de menos a Casemiro porque toda su fuerza está en el equilibrio. Podría haber sido la final del Mundial, al final regalaron ambas selecciones un espectáculo enorme donde destacó Courtois, un porterazo.
Roberto Martínez fue atrevido en su planteamiento de juego aprovechándose de la debilidad que para Brasil suponía no contar con Casemiro. Premiaba el seleccionador belga a Fellaini y Chadli su heroicidad ante Japón y abría a Lukaku y Hazard más a las bandas con De Bruyne disfrazado de falso delantero centro.
Se alió la suerte con Bélgica: hizo subir el 0-1 sin disparar una sola vez a puerta. Fue en el minuto 13 de partido en un córner que busca rematar Kompany, Fernandinho cierra los ojos y desvía el balón para sorprender a Allison. Auto-gol de Brasil y un golpe psicológico para Fernandinho, que estaba como un flan.
Brasil no se vino abajo. Continuaba probando con disparos desde fuera del área como el de Coutinho en el minuto 18, con Marcelo conectando con Neymar y con último disparo del lateral, pero con la selección belga con las ideas muy claras, tanto que en el minuto 30, Lukaku lanzaba un contragolpe demoledor, superando a Miranda, librándose de Paulinho y enviando a Marcelo a tres metros para dejarle el balón a De Bruyne que se inventó un latigazo desde fuera del área que hacia subir el 0-2 al marcador. Coutinho lo probaba de nuevo con un disparo a media altura pero ahí estaba Courtois,
tan seguro, tan atento.
Tite movió el banquillo: Firmino por Willian, que no había hecho prácticamente nada en la primera mitad del encuentro y cambiando el dibujo a un 4-4-2 con Firmino y Neymar en punta.
Gabriel Jesús se marcaba en el min.56 una jugada increíble con caño a Vertonghen y Kompany hacía falta al delantero del City y el VAR de forma sorprendente no pitaba penalti cuando era claro.Un error clamoroso.
Tite decidía cambiar a Gabriel Jesús para que entrase Douglas Costa y continuaba el claro dominio de la canarinha. Renato Augusto entraba por Pauliho y en el 76 remataba de cabeza en el área un centro alucinante de Coutinho, milimétrico, haciendo de Paulinho, silencioso, entre los centrales. Subía el 1-2 al marcador. Firmino tenía otra ocasión con un control con el exterior y Neymar entregaba a Courtois el traje de héroe con otra gran parada